Un testigo aseguró que los señalados ultimaron a balazos, en el 2005, a Adelso Castillo, porque este supuestamente había violado a una nieta de los sentenciados.
La Fiscalía acusaba a los esposos de homicidio, pero al escuchar la declaración del testigo, pidió que fuera cambiado al de homicidio en estado de emoción violenta.
En su declaración, Hernández expresó: “Yo le disparé en el pecho dos veces con la pistola de mi esposo”.
En tanto que Orantes indicó: “Cuando se vio herido de bala, sacó su arma y quiso atacar a mi señora, yo le quité la pistola a ella y lo rematé. No lo niego, los dos lo matamos”.