El fuego comenzó en la parte trasera de la granja Santa Ana, y ya consumió 40 hectáreas de bosque de dos años, así como 20 hectáreas de un área de reforestación.
Los propietarios de la finca Gaby, donde ocurrió el siniestro, indicaron que el fuego ha destruido más de 15 mil árboles de cedro y caoba. Además indicaron que el fuego hizo que varias cabezas de ganado desaparecieran del lugar.