Manuel Mejía, de 22 años, integrante del Consejo Comunitario de Desarrollo (Cocode), narró que las fuertes lluvias que azotaron el área montañosa en donde se ubica su cantón, provocaron el desprendimiento de gran cantidad de sedimentos del cerro en donde construyeron sus viviendas.
“Tres veces se vino la montaña amenazando nuestras vidas. Esto nos obligó a trabajar más de siete horas con la intención de evitar que el derrumbe llegara a nuestras casas”, indicó Mejía.
“Lamentablemente no lo conseguimos y preferimos huir y abandonar nuestras pocas pertenencias, antes de ser sepultados por la tierra, tal y como ocurrió el año pasado durante la tormenta Ághata, cuando murieron nueve personas en Camalibal, Chitinimit y Paquixit, cantones vecinos”, agregó Mejía.
El Gobernador Departamental, Raúl Matías, agregó que todas las instituciones del Estado acreditadas en Quiché están proporcionando vehículos y personal para atender a los damnificados por el invierno.