Enrique Aceytuno, de la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) en Santa Cruz del Quiché, dijo que el menor legalmente es inimputable, por lo que no tenía ninguna responsabilidad por lo ocurrido.

“Haberlo amarrado a un palo violó los derechos del menor. Se podía haber llegado a un acuerdo con sus familiares, como al final de cuentas ocurrió, pero sin afectar moralmente al pequeño” dijo Aceytuno, quien añadió que la acción de las personas afectadas por el supuesto robo de sus aves fue grave.

Aparte, el alcalde indígena de Santa Cruz del Quiché, Juan Zapeta López, expresó que no se enteró de lo ocurrido; sin embargo, aseguró que quien debió haber sido sancionada públicamente fue la madre del niño.

“Definitivamente, a quien hay que sancionar es la a persona adulta, a su progenitora, por inducirlo a cometer un delito. Un niño sólo recibe órdenes de papá o mamá y por ello, él no tiene mayor culpabilidad y no fue correcto que el niño permaneciera amarrado”, expuso Zapeta.

Cómo ocurrió el hecho

El 20 de este mes, un grupo de pobladores  de la aldea El Carmen Chitatul, Santa Cruz del Quiché, mantuvo retenido y amarrado a un niño de 10 años, a quien acusaban de haber robado cinco gallos en una granja del referido municipio.

Marta García, propietaria del terreno donde fueron robados los animales, dijo que cuando se percató de que habían robado cinco de sus gallos más grandes, pidió a familiares que vigilaran el lugar, para evitar que desconocidos ingresaran de nuevo.

“Grande fue nuestra sorpresa al darnos cuenta de que el ladrón de pollos resultó ser un niño. Inmediatamente fue capturado por los vecinos cuando intentó robarme más animales”, indicó García.

Opiniones encontradas

Algunos usuarios de redes sociales apoyaron la medida tomada por los vecinos de la comunidad, y expresaron su opinión a través de comentarios en el muro de Facebook de Prensa Libre; mientras que otros repudiaron el hecho.

Eddy Pérez, internauta, opinó que la medida tomada se ve muy dura, pero que es algo que le cambiará la vida al niño, pues no será más un ladrón. Además, señaló que la madre del niño debió de ser castigada también.
El usuario Tato Villa Grn comentó que el castigo fue inhumano, pero que quizá esa lección no se le olvide nunca al niño.

“Creo que a eso se deben los problemas actuales de delincuencia, me refiero a que ya no se actúa con tanta severidad para castigar a los menores un error de esos. Es cierto que existen otros métodos menos denigrantes, pero como dijeran los psicólogos, la terapia de choque a veces es más efectiva”, finalizó el usuario.

“¡Es un niño! Él aprende de los padres y la mama debería de estar ahí dando la cara. Pobre niño, él no tiene la culpa de los papas que le tocaron. Ojalá alguien le enseñe que él sí puede escoger a sus amigos y su futuro”, expresó Ana Elisa Camacho.