La gestión para esta obra de beneficiencia fue llevada a cabo por la Asociación de Desarrollo Integral de la Cuenca del Rio Samalá, y se tomó en cuenta a pobladores del municipio mencionado, El Asintal y la cabecera departamental.
Cristian Munich de la organización Bethel dijo: “Tenemos una sede en Huehuetenango donde reparamos sillas usadas que nos envían de Estados Unidos, luego las llevamos a las comunidades pobres de este país y las entregamos a las personas que las necesitan. Son gratuitas, nosotros no cobramos ni un solo centavo, queremos ayudar en algo a los pobres”.
Munich indicó que ha visto la necesidad de las personas en algunos lugares, en donde no tienen ni para comer, mucho menos para comprar una silla de ruedas o andadores, ya sea para ancianos o para personas discapacitadas.
El valor del lote entregado fue de aproximadamente US$60 mil dólares, debido a que cada silla de ruedas tiene un valor aproximado de Q6 mil y el andador Q1 mil.