Miembros de la sociedad civil de la ciudad colonial señalan que las autoridades locales no han tenido la capacidad de ordenar el paso vehicular durante las noches de los fines de semana y hacer que los comercios cumplan con las regulaciones.
Denise Castillo, presidenta de Salvemos Antigua, expresó: “La ciudad se está convirtiendo en un centro comercial o un parque temático, porque todos los días hay bullicio”.
Añadió que la comuna tiene reglamento, pero los negocios no lo respetan.
Falta de autoridad
José Víctor Ordóñez, del Consejo Cívico de Vecinos, afirmó que el problema también se debe a que la Policía Nacional Civil (PNC) no tiene autoridad.
Aseguró que los vecinos que residen a la par de negocios que no respetan el reglamento se quejan de que no pueden descansar o que frente a sus inmuebles permanece sucio.
Según Juan Domingo Pérez, otro integrante de ese consejo, la solución es tener reglas claras y que las autoridades controlen el desorden que hacen algunos jóvenes en las calles y el alto volumen en las discotecas.
Un vecino de Antigua Guatemala recordó que el reglamento de la ciudad obliga a los negocios a cerrar a las 23 horas, pero muchos continúan hasta medianoche o 1 de la mañana, pero no retiran a sus clientes, y lo único que hacen es bajarle un poco de volumen a la música, pero el consumo de alcohol y la fiesta siguen.
“Algunas veces hemos visto que agentes de la PNC se detienen frente a estos negocios y el dueño o administrador de los locales sale a platicar con ellos, y luego los autopatrullas se van.
Sin planificación
Pérez indicó que es un problema de falta de planificación, ya que no se trata de crear una guerra entre dueños de bares, discotecas y vecinos.
El conservador Norman Alfonso Muñoz Urízar afirmó que el Consejo Nacional para la Protección de Antigua Guatemala está preocupado por la contaminación visual y auditiva, por lo que solicitaron a la Gobernación y a la comuna que regulen los comercios.
El alcalde Édgar Ruiz ordenó al juez de Asuntos Municipales, Luis Morales, que agilice los procesos administrativos y legales, para que se sancione a los negocios que no cumplen la ley.
Aseguró que las sanciones pueden ir desde amonestación verbal, escrita o económica, e incluso el cierre temporal o definitivo de los negocios. Sin embargo, los comerciantes pueden interponer recursos.
El juez Morales explicó que está autorizado un máximo de 60 decibeles de volumen, pero en algunos negocios oscilan entre 80 y cien decibeles.
Añadió que solo hay dos discotecas autorizadas en esa ciudad, pero hay restaurantes y cafeterías que funcionan como tales o expendios de licor.
Los Bomberos Voluntarios reportaron que recientemente hallaron a dos hombres, quienes supuestamente habían sido agredidos sexualmente, afuera del Palacio de los Capitanes Generales.
Refirieron que las dos personas estaban bajo efectos de licor y alguna droga, y quienes los agredieron los dejaron semidesnudos.
Efectúan operativos
Respecto de las quejas de vecinos por el bullicio y el desorden en la ciudad colonial durante los fines de semana, la gobernadora de Sacatepéquez, Teresa de Jesús Chocoyo, afirmó que la PNC, con apoyo de personal de la comuna, efectúa operativos para contrarrestar el problema.
La funcionaria pidió la colaboración y comprensión de los vecinos para que no consuman licor en las calles, ya que ello genera riñas o pueden ser víctimas de algún acto delictivo.
Añadió que el Ministerio de Gobernación les ofreció reforzar los registros con el apoyo de la multisectorial de la capital.
Normas vigentes
El 29 de abril del 2008, el Concejo aprobó del Reglamento de Clasificación de Negocios de Atención Alimenticia y Solaz de Antigua Guatemala y Horarios de Funcionamiento.
Las discotecas deben dejar de atender a las 23 horas, según el reglamento de la comuna de Antigua Guatemala.
Las cafeterías tienen autorizado mantener abiertos sus negocios hasta las 22 horas.
Propietarios de tiendas tienen autorizado atender hasta las 21 horas, y solo pueden vender licor para llevar.
El reglamento municipal contempla que los restaurantes deben cerrar a las 23 horas.
Sesenta decibeles son los autorizados para el volumen en los negocios.
Las multas para los comercios que no respeten el horario oscilan entre los Q20 mil y Q30 mil, según el Juzgado de Asuntos Municipales de la ciudad colonial.
