Balseros de Tecún Umán, San Marcos, habían iniciado una lucha para que el Gobierno de México reabriera cuatro pasos cerrados a raíz de la demolición del mercado a la orilla del río Suchiate, para dar continuidad a la construcción de un muro de piedra y proteger así a los pobladores de los desbordamietos en el lado de Ciudad Hidalgo, pero en forma sorpresiva se enteraron que estos fueron reabiertos.
Según el gobierno mexicano, los pasos El Coyote, El Palenque, El Limón y El Rojo fueron reactivados a petición de los tricicleros y comerciantes de Ciudad Hidalgo, porque se quejaron de que tenían pérdidas económicas por esa medida.
María Telma Hernández, supervisora de los balseros guatemaltecos, refirió que contaban con el apoyo de los tricicleros y comerciantes del vecino país.
Agregó: “Solo nos habilitaron cien metros a la orilla del río para que los casi 300 camareros guatemaltecos pudieran realizar operaciones de carga y descarga del lado mexicano.
