Milton López, cuñado de Carranza, dijo que este tenía más de 4 años de trabajar como seguridad en dicha finca, y que desconocía si estaba amenazado de muerte.
Agentes de la Policía presumen que el ataque fue directo, pero que realmente se desconoce las causas reales de este ataque armado; además, el arma que el guardia de la finca tenía se presume pudo ser robada por los mismos delincuentes.