La pequeña había salido de su casa hacia una caseta a comprar una sopa instantánea para su almuerzo cuando fue raptada.
Hernández vivía junto a sus padres en el sector Las Piedrecitas, colonia Linda Vista. Había sido adoptada por una pareja y este año iba a obtener su diploma de párvulos.
La madre, al observar que la niña no regresaba, salió con un bebé en brazos a buscarla, y un joven la ayudó a buscar a la pequeña, quien fue localizada a orillas del río.
El padre adoptivo de la niña dijo que está desempleado, por lo que no tenía dinero, decidió ir a donar sangres para obtener dinero y así comprar alimentos para la familia, pero cuando regresó se enteró de lo que había ocurrido con la nena.
Los pobladores quedaron conmocionados por el hallazgo de la pequeña, e indicaron que nunca había ocurrido algo tan impactante en ese lugar. Además exigen que capturar a los responsables y que sean castigados.
