Los manifestantes gritaban consignas en contra de la violencia y exigieron al gobernador, Henry Adelso Salazar, que saliera para dialogar con ellos, pero no lo hizo, por lo que los vecinos inconformes pidieron con gritos que renunciara.
Sobreviven
Los presuntos sicarios, identificados como Donis Emerson Monroy Corado, de 19 años, y Omar Guadalupe Hilario, 17, fueron trasladados hacia el Hospital Roosvelth en la capital, después de que una turba fue dispersada por las fuerzas de seguridad, para rescatarlos.
Erick Fernando López Alfaro, piloto del mototaxi que resultó herido, fue intervenido quirúrgicamente ya que una bala le hirió la cabeza, y se recupera en el Hospital Nacional de Cuilapa.
Agentes de la Policía Nacional Civil allanaron una vivienda donde se presume que los supuestos sicarios vivían, y localizaron una motocicleta y municiones de calibre ignorado, indicó el comisario Valdemar Gómez.