Victoria Jiménez, líder de la colonia Valladares II, expresó: “Nos presentamos a la Gobernación a solicitar ayuda, pero nos dijeron que debíamos tener el documento de identificación personal o cédula”.
Agregó que ella se encuentra al frente de 30 familias, y ninguna autoridad ha llegado a ofrecerles apoyo. Jiménez explicó que duermen en el suelo, en el campo y en la calle, y lo peor es que muchos niños padecen dolencias respiratorias debido al frío.
Gloria Morales, del barrio El Llanito, dijo: “En nuestro sector hay unas 150 personas que no han recibido ayuda, a pesar de que este lugar fue uno de los más afectados; hemos visto que han entrado camiones a la Gobernación a descargar víveres, pero desconocemos cuál es el motivo por el que no nos apoyan”.
Vilma Barrios, del barrio Las Delicias, expuso: “Estamos ubicados en la vía pública, ya que los temblores no terminan. También nos presentamos a la Gobernación, pero no nos quieren dar nada”.
Afirmó que la situación ha empeorado, porque los productos de la canasta básica están más caros, y hasta los mototaxis cobran Q5 y no Q3, como antes.
Un grupo de personas de la iglesia Casa de Dios de Jutiapa, dirigidos por el pastor evangélico Élder López, llegó a los albergues donde la ayuda aún no ha llegado. Según López, los alimentos que ellos entregan no se están llevando a los albergues oficiales, porque estos son atendidos por la Conred.
Refirió que se entrega arroz, maíz, frijol, aceite, azúcar, sopas instantáneas y el Nuevo Testamento —parte de la Biblia—, “ya que no solo de pan vive el hombre”.
El gobernador Mynor Morales señaló que hasta ahora se ha visto la respuesta de apoyo a los damnificados.
Agregó que para hoy se tiene previsto llevar ayuda a comunidades de Santa María Ixhuatán, Oratorio y Pueblo Nuevo Viñas. “Los alimentos los estamos repartiendo principalmente en los albergues que son prioridad”, enfatizó el funcionario.