Según vecinos, el derrumbe tiene cien metros de longitud, el cual mantiene obstaculizados los dos carriles.
Por el momento la cantidad de vehículos varados son pocos, pero se prevé que con el paso de las horas aumente la cantidad de automotores en dicha ruta.
El Cerro Lec es un lugar de constante peligro para los conductores que transitan en esa ruta, y debido al peligro constante es monitoreado por la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred).
A mediados de este año, Cristian Rodríguez, delegado de la Conred en Sololá, explicó que el terreno del Cerro Lec es lodoso, debido a que cerca del lugar hay manantiales y corren varios riachuelos, cuyo caudal aumenta cuando llueve, lo cual socava el suelo.