Rui Nitahara, encargada del campamento, dijo que el objetivo es desarrollar en algunas escuelas rurales un proyecto que a corto plazo se convierta en un plan piloto en el área de educación ambiental.
Nitahara añadió que al final del campamento se espera generar un espacio de aprendizaje a través de actividades recreativas, para que los estudiantes practiquen lo aprendido y lo compartan en sus escuelas y comunidades.
Explicó que a los niños participantes se les enseña educación ambiental y agroforestal, y cómo utilizar mejor los recursos naturales.
Juan Carlos Villatoro, de la referida facultad, indicó que la actividad se desarrolla en un ambiente de convivencia entre los estudiantes y los 11 voluntarios de Japón.