La excusa de los transportistas es que la mayor parte de caminos son de terracería, en los cuales los microbuses no pueden desplazarse, en especial en invierno; sin embargo, es común observar picops con pasajeros en la ruta entre la cabecera y Panajachel, que está pavimentada y es de fácil acceso.
Javier Laparra, de la Comisión de Urbanismo de la Municipalidad de Sololá, indicó que se les ha extendido permiso a 120 unidades, pero en todo el departamento circulan unas dos mil.
Andrés Ibaté, transportista, manifestó que es más rentable y económico utilizar picops, y que llegan a lugares donde los microbuses no pueden acceder.
Los usuarios han denunciado en la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH) que son objeto de malos tratos y viajan inseguros, por lo que esa institución efectúa operativos, con apoyo de la Policía Municipal de Tránsito (PMT), para verificar que los vehículos no sean sobrecargados.Ovidio Paz, delegado de la PDH, considera que la gente utiliza picops porque así lo desea, pues también circulan buses. Instó a transportistas a que renueven las unidades y traten bien a los pasajeros.