De acuerdo con López Lopreto, el jueves 15 de enero la menor salió de su casa ubicada en la Aldea San Ramón, San José el Ídolo, rumbo a la cabecera departamental para continuar con su capacitación, y desde entonces no tenían información de su paradero.
Ese mismo día colocaron una denuncia de desaparición en la Subestación de la Policía Nacional Civil (PNC) de Mazatenango. Por ser menor de edad se activó, en conjunto con la Procuraduría General de la Nación (PGN), la alerta Alba Keneth.
Carlos Tumax, de Bomberos Municipales Departamentales, indicó que es posible que la fémina haya sido asesinada el mismo día de su desaparición, debido al avanzado estado de descomposición en que se encontraba el cadáver.
Técnicos del Ministerio Público (MP) manifestaron que Lopéz murió por asfixia, debido a que su propio cincho le rodeaba el cuello, y estaba boca abajo, por lo que presumen que fue sometida por una persona más fuerte que ella.
Las primeras investigaciones apuntan a que una persona allegada la llevo al interior de la finca, porque no tiene rastros que haya sido llevada por la fuerza.
Ya en la escena del crimen y aprovechando la soledad del sector, su victimario la atacó. Se cree que el asesino podría haber tenido una relación sentimental con la menor.
Junto al cuerpo de la fémina se encontraba un folder de Fundap con hojas de papel y una botella plástica de una bebida carbonatada. El cadáver fue llevado al Instituto Nacional de Ciencias Forences (INACIF) de Mazatenango.