Por su cercanía con Mazatenango, la población de San Gabriel tiene acceso a fuentes de trabajo y servicios de salud y educación.
Cambio de suelo
Hasta hace una década, San Gabriel era predominantemente agrícola y pecuario, y ahora se ha convertido en un pueblo dormitorio, pues mucha población económicamente activa de la cabecera se ha mudado al pueblo vecino, por falta de espacio habitacional.
Esta situación ha condicionado los fondos municipales, que se deben concentrar en proyectos para satisfacer las necesidades de un alto índice de urbanización, como alcantarillas, agua entubada y una red más amplia del alumbrado público.
El aporte del situado constitucional y otros fondos gubernamentales son insuficientes, pero el Consejo Departamental de Desarrollo ha apoyado en la construcción de drenajes y ampliación de la red de agua entubada. Este año se le asignaron otros Q3 millones 689 mil 905 para estos proyectos.
El alcalde de San Gabriel, Domingo Camey, señala que el rápido crecimiento urbanístico no es del todo beneficioso, en especial porque los vecinos no están acostumbrados a pagar impuestos, por lo que no se recauda el total del impuesto único sobre inmuebles (IUSI). “Es una tarea en la que vamos a ir avanzando poco a poco”, expuso.
La buena recaudación del IUSI incrementaría lo que se recibe del aporte constitucional, pues así lo estipula la fórmula matemática de distribución de fondos en el Código Municipal. Por ello Camey reclama el área en el que se encuentra la colonia Pasadenas, que le pertenece a San Gabriel, pero la comuna de Mazatenango cobra el impuesto.
Necesidades
También se necesitan más fondos para promover comercio e industria. “Hacen falta fuentes de trabajo, pues aquí solo la Municipalidad es la que da empleo, pero no hay muchos puestos”, lamentó el vecino Rodrigo Xicay.
Todavía quedan muchos residentes que se dedican a la crianza de ganado avícola, porcino y vacuno, y dado que no cuentan con rastro, destazan en sus casas o en el de Mazatenango.
Harold Pérez, delegado del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación, indicó que se consumen unas 20 cabezas de ganado a la semana, por lo que deberían contar con un rastro de categoría B o C.
Camey señaló que en la primera sesión del 2014 el Consejo Municipal de Desarrollo determinó como prioridad esta obra.
Sin embargo, los problemas más graves están fuera de los recursos de la comuna. El municipio no cuenta con nacimientos de agua, por lo que las familias la toman de pozos de Zunilito.
El otro problema es el ambiental, pues los vecindarios de Mazatenango descargan sus aguas servidas a tres ríos. Uno de ellos es el Sis, que pasa por San Gabriel altamente contaminado, y la polución aumenta, pues tampoco se tienen plantas de tratamiento de aguas servidas.
“Es algo que no se puede hacer solo, por lo que se dialogará con las autoridades de Mazatenango para encontrar una solución”, expuso el jefe edil.
CIFRA
Q3.5 millones tiene asignado San Gabriel en el situado constitucional.