La población al percatarse de lo que ocurría las detuvo y avisó a las autoridades comunitarias, las cuales las llevaron al salón comunal para interrogarlas.
Mientras esto sucedía, una turba quebró los vidrios y puertas de la instalación y sacó a las dos sindicadas, luego las vapulearon y quemaron.
Aún se desconoce la identidad de las dos mujeres.
La situación es tensa, ya que la turba permanece en el lugar, y no permite el ingreso de los agentes de la Policía Nacional Civil.