Messi no sólo nunca más faltó a un partido; jugó incluso aquellos en los que podía ser preservado con la selección ya clasificada para la siguiente fase.
En el Mundial de Sudáfrica-2010 disputó los cuatro encuentros, incluyendo el tercer partido sin incidencia de la ronda de grupos contra Grecia (2-0) y la dolorosa goleada 4-0 Alemania en cuartos de final.
https://twitter.com/LevisStadium/status/739993799347208192
La siguiente cita fue en Argentina para la Copa América-2011, otra frustración que terminó en eliminación por penales en cuartos del final ante Uruguay.
La Pulga otra vez disputó los cuatro partidos como titular.
En el Mundial de Brasil-2014, Messi jugó los siete partidos, marcó cuatro goles, y sufrió la derrota en la final ante Alemania 1-0 en la prórroga.
El último gran torneo fue la reciente Copa América Chile 2015, en la que Argentina llegó nuevamente a la final para caer por penales ante el local.
Messi jugó los seis partidos y marcó un gol.
El capitán argentino es reemplazado por el volante Nicolás Gaitán, del Benfica, actual campeón de Portugal.
El orientador de Chile, el argentino Juan Antonio Pizzi, había admitido que “cualquier equipo de fútbol se ve condicionado por la participación de Messi”.
En los últimos años Messi -que está aquejado por un golpe en la zona lumbar- se ha quedado afuera de partidos oficiales de Argentina, por ejemplo por eliminatorias mundialistas, como fue el caso ante Colombia en Barranquilla en noviembre pasado (victoria 1-0, gol de Lucas Biglia) .
Las selecciones de Argentina y Chile cierran la primera fecha de la Copa América Centenario con un duelo que promete chispas aún sin la presencia del astro Lionel Messi en el once titular albiceleste.