Davis entrenó sin tener contacto por segundo día consecutivo esta semana y lleva a cabo las recomendaciones para sanar de la conmoción que sufrió durante la derrota de la semana pasada ante los Seahawks de Seattle.
El ala cerrada ya recibió autorización de un neurólogo independiente y del preparador físico de los 49ers para reintegrarse a la actividad sin contacto, y podría recibir el alta médica para jugar si aprueba el último paso en el protocolo antes del domingo.
El equipo tiene la necesidad de que Davis ingrese al campo de juego luego de haber enviado al receptor abierto Mario Manningham a la lista de reservas lesionados.
Manningham sufrió ruptura de ligamentos de la rodilla durante el partido contra los Seahawks, mientras que Davis sufrió la conmoción tras ser golpeado por el profundo Kam Chancellor.
Después de esa jugada Davis salió del campo y no regresó a la acción. Chancellor fue castigado por rudeza innecesaria.