La estrella de los Cavaliers, 12 temporadas en la NBA, el pasado sábado ya había empatado con Price la marca de asistencias de todos los tiempos de los Cavaliers (4.206) y era cuestión de jugar un partido más que le permitiese conseguir otra hazaña deportiva en el equipo que le catapultó a la fama.
James concluyó el encuentro de líder al aportar 27 puntos, ocho asistencias, siete rebotes, recuperó un balón y puso un tapón en los 29 minutos que jugó.
“No me preocupan las marcas individuales, lo único que deseo es aportar siempre al equipo y que mis compañeros sean también mejores en el campo con mi ayuda”, declaró James al concluir el partido.
Aunque James esta vez jugó sin su tradicional cinta que lleva puesta en la cabeza, la estrella de los Cavaliers lo hizo todo bien en el campo y confirmó que el equipo también va a más en su juego de conjunto al tener a los cinco titulares con números de dos dígitos.
El entrenador de los Mavericks, Rick Carlisle, reconoció que James ha demostrado que su aportación e influencia en el campo es similar a la que tuvieron en su momento estrellas como Michael Jordan, Dominique Wilkins, Julius Erving y Magic Johnson.
“LeBron James tiene las mismas habilidades que todos estos jugadores”, valoró Carlisle. “Es justo una combinación total. Puede jugar de número uno, de dos, de tres, de cuatro y hasta de cinco si tuviera a cuatro compañeros más bajos con él”.
James reiteró que desde que era niño siempre le enseñaron cuando comenzó a jugar al baloncesto que no importaba el “yo” sino el equipo y su gran lección fue el tener a un compañero que tenía problemas a la hora de conseguir el balón y tirar a canasta y cuando entre todos los ayudaron a conseguirlo, el día que lo logró fue algo que jamás olvidará.
“Por eso mismo, mi manera de comportarme en el campo es algo natural, no me cuesta nada compartir con todos mis compañeros”, agregó James.