“Es hora de que la vea”, dijo Nel en el primer día de su contrainterrogatorio a Pistorius. “Lo recuerdo”, respondió el corredor de piernas amputadas, quien reaccionó consternado y miró al lado opuesto de donde se mostró la foto en una pantalla a su lado. “No voy a mirar una foto ya que estoy atormentado por lo que vi y sentí esa noche. Cuando levanté a Reeva, mis dedos tocaron su cabeza. Lo recuerdo. No tengo que mirar la foto, yo estuve allí”.
Nel sentó las bases para un contrainterrogatorio riguroso, al exigir a Pistorius que dijera que mató a su novia, y desafiándolo cuando el atleta dijo que había cometido “un error”. El fiscal pidió permiso a la jueza para mostrar un video del atleta disparando una escopeta y diciendo que era tan potente como “para detener zombis”.
El abogado defensor Barry Roux objetó la presentación del video y dijo que era una evidencia inadmisible que podría calificarse como “una emboscada” . La jueza Thokozile Masipa aceptó que se mostrara el video. Pistorius sostiene que le disparó por accidente a su novia al confundirla con un intruso que había entrado en su casa la madrugada del 14 de febrero de 2013.
El atleta está acusado de homicidio premeditado y podría recibir una condena de entre 25 años y cadena perpetua si se le declara culpable. Nel trató de contrarrestar la imagen de persona amable que la defensa de Pistorius trató de presentar durante los tres días de declaraciones. De entrada le pidió que reconociera que había matado a Steenkamp. “Cometí un error”, respondió Pistorius. “Cuál fue su error?”, replicó Nel.
Pistorius dijo entonces: “Arrebatar la vida de Reeva”. “Usted la mató”, ripostó Nel. “Le disparó y la mató”, aclaró, y le pidió que lo dijera. Pistorius sólo murmuró “lo hice”. Previamente el miércoles recreó su versión de lo sucedido el día de la muerte de Steenkamp. Pateó la puerta y golpeó con un bate de cricket la puerta de madera perforada por las balas que fue colocada en el tribunal como evidencia.
Señaló que trató de abrir la puerta a puntapiés con sus prótesis y luego usó el bate para demostrar cómo trató de llegar a Steenkamp. Pistorius describió lo que llamó los últimos minutos de vida de su novia y cómo la arrastró hacia afuera del baño y la llevó por la escalera para recibir ayuda luego de que él le disparara.
“Reeva murió cuando la estaba sosteniendo”, recordó Pistorius, quien describió cómo puso los dedos en la boca de la mujer para tratar de ayudarla a respirar y la manera en que presionó su cadera en su intento de detener la hemorragia causada por la herida. Pistorius dijo que se sintió “indefenso” y que quería llevar a Steenkamp al hospital pero que un vecino le sugirió que esperara a los paramédicos. La policía arribó al sitio más tarde.
“Le pregunté a un policía si podía lavarme las manos porque el olor de la sangre estaba a punto de hacerme vomitar”, indicó Pistorius. “Cada vez que veía a Reeva sentía nauseas así que estuve más tiempo en la cocina. Me senté en la despensa, junto a la lavadora”.