Fútbol Internacional

Kempes se consagra y guía a la albiceleste a la cima mundial

La XI edición de la Copa del Mundo se disputó del 1 al 25 de junio, en Argentina, y fue conquistada por el seleccionado local, en un certamen marcado por la consagración del mediocampista Mario Alberto Kempes, quien guió a la selección gaucha a su primer título mundial.

CIUDAD DE GUATEMALA – Con este certamen, la Copa del Mundo volvía a Sudamérica desde 1962, cuando fue realizada en Chile.

Argentina ganó su primer mundial de la historia al vencer en la gran final del 25 de junio a Países Bajos (3-1) en el estadio Monumental en Bunos Aires, en un duelo bastante parejo que tuvo que definirse en tiempos extras, después que en 90 minutos el marcador se mantuviera 1-1. Mario Kempes y Daniel Bertoni anotaron los goles de la ventaja para conquistar el cetro.

El tercer lugar de la competencia lo ganó Brasil, al derrotar 2-1 a Italia, también en el estadio del equipo argentino River Plate.

El cordobés Mario Alberto Kempes, también conocido como el “Matador” terminó como goleador, con seis dianas, en un mundial que registró un total de 102 anotaciones en 38 partidos disputados, con la participación de 16 selecciones.

Uno de los grandes ausentes fue el holandés Johan Cruyff, pero aparecieron figuras como Teófilo Cubillas, Dino Zoff, Michel Platini, Paolo Rossi y el mismo Kempes.

Los detalles

Argentina elaboró el certamen de manera pomposa, con un desembolso del estado de 520 millones de dólares, invertidos en la construcción de tres nuevos estadios (Córdoba, Mendoza y Mar del Plata), además de la remodelación del Monumental de Núñez y el Amalfitani de Liniers (Buenos Aires), y el Gigante de Arroyito, en Rosario, Santa Fé.

La mascota de este mundial fue Gauchito, basada en el estereotipo de la imagen del gaucho argentino. El diseñador fue Néstor Córdoba.

Mientras que el balón fue la Adidas Tango, compuesta por veinte paneles que creaban la impresión óptica de doce círculos idénticos.

El tema musical fue compuesto por Ennio Morricone y se llamó El Mundial.

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