Se le imputa un delito de resistencia y desobediencia por el que el juzgado correspondiente le llamará a declarar en un futuro, y quedó en libertad por el tipo de delito que supuestamente cometió y porque no hay riesgo de fuga, según las mismas fuentes.
El incidente ocurrió al inicio del partido entre el Atlético de Madrid y el Barcelona en las inmediaciones del paseo de Pontones, junto al estadio Vicente Calderón, cuando Ansaldi, que no estaba convocado para el encuentro, llegó a una zona de seguridad vallada por la Policía y trató de pasar sin presentar la documentación correspondiente, han informado a Efe otras fuentes policiales.
Los policías municipales le dijeron que no podía acceder, pero el jugador bajó del coche y trató de mover la valla, lo que motivó un altercado en el que el jugador acabó atrapando la mano de un agente con la puerta de su coche.
Este agente acudió luego a un centro médico de su mutua en el que le atendieron y le hicieron el correspondiente parte de lesiones, según estas mismas fuentes.
Esta agresión, según la consideraron los agentes municipales en su comparecencia policial, unida a que el jugador no llevaba encima la documentación del vehículo, hizo que le detuviesen y le trasladasen a la Comisaría de la Policía Nacional del distrito de Arganzuela, de la que salió sobre la una de la madrugada.