Con la victoria en su visita a la región de Apulia, el Nápoles se pone provisionalmente con 19 puntos de ventaja sobre el segundo, la Lazio, que el sábado recibe a la Juventus (7ª).
Esa gran ventaja debería permitir a los napolitanos asegurar matemáticamente el título italiano en unas semanas, salvo un desastre que parece improbable.
A cinco días de reencontrarse con el Milan en la ida de cuartos de final de la Liga de Campeones, el capitán Giovanni Di Lorenzo abrió el camino para el Nápoles, marcando de cabeza a centro de Kim Min-jae en el 18.
El Nápoles dominó claramente hasta el descanso, pero en el inicio de la segunda mitad se vio sorprendido con el empate: un remate de cabeza de Assan Ceesay fue al larguero y en el rechace Federico Di Francesco controló y puso el 1-1 en el 52.
El estadio Via del Mare celebró el primer tanto del Lecce desde el 19 de febrero. Su equipo venía de cinco derrotas sin anotar.
Pero el Lecce (16º) no resistió mucho tiempo más: Antonino Gallo hizo equivocarse a su propio arquero y terminó anotando en contra (64).
El Nápoles se centró en la última media hora en evitar cualquier sorpresa atrás y amarrar la victoria. Tras el pitido final, empezó a pensar ya en San Siro, en el Milan y en los cuartos de Champions.
Para ese partido del miércoles, Spalletti espera poder recuperar al goleador nigeriano del equipo Victor Osimhen, que siguió de baja por lesión este viernes. El argentino Gio Simeone, por su parte, fue cambiado tras un problema en un muslo.
En el primer partido del viernes, el Inter de Milán (4º) siguió con sus problemas en la Serie A y vio cómo se le escapaba la victoria (1-1) en el descuento final en el terreno de la Salernitana (15ª).
Este decepcionante empate llega para el Inter cuatro días antes de su duelo ante el Benfica en la ida de cuartos de final de la Liga de Campeones.
Los ‘nerazzurri’ dominaban 1 a 0 en Salerno desde el gol temprano de Robin Gosens (minuto 6), pero los locales igualaron con un centro-chut de Antonio Candreva (90), exjugador precisamente del Inter.