El actual vicepresidente de la FIFA y miembro del comité ejecutivo es uno de los cuatro candidatos a presidir el organismo, junto al actual presidente, el suizo Joseph Blatter; el exjugador portugués Luis Figo; y el presidente de la Federación Holandesa (KNVB), Michel van Praag.
“Después de escuchar a muchos colegas que me reiteraron que era el momento de cambiar, tomé la decisión de presentarme por el bien del fútbol. El cambio, sin embargo, ha de ser desde arriba. Somos varios candidatos y necesitamos unas elecciones limpias”, manifestó Al Hussein, en un hotel en la capital británica.
“La campaña ya ha empezado y va a ser un desafío. Aunque queda mucho para el 29 de mayo, tengo mucha confianza”, subrayó el jordano, que reveló que ha contado con el apoyo de las federaciones de Inglaterra, Estados Unidos, Georgia, Bielorrusa, Malta y Jordania.
“Tengo el apoyo de tres confederaciones diferentes (por continentes), y aprecio el soporte de Michel Platini, presidente de la UEFA, que está trabajando codo a codo conmigo”, agregó.
El príncipe Ali, de 39 años, elogió al resto de candidatos y reconoció que estaría “abierto a trabajar con ellos” para “mejorar la imagen de la FIFA en todo el mundo”.
“Estoy deseando reunirme con ellos. Conozco muy bien a (Luis) Figo, es un buen amigo, y también a Michel van Praag. Considero positivo que haya más de un candidato, eso muestra el profundo deseo por el cambio”, dijo.
“Estaría abierto a trabajar como equipo con otro de los candidatos. Debemos estar más centralizados y esa sería una buena forma de hacerlo”, respondió Al Hussein a una pregunta de Efe.
“Me gustaría tener un debate entre todos los que vamos a presentarnos; es algo necesario para dejar clara nuestra posición”, añadió el jordano.
Al Hussein se mostró convencido de poder derrotar a Joseph Blatter, quien preside la FIFA desde 1998, en las elecciones del próximo 29 de mayo y aseguró que es el momento para que la FIFA “recupere la confianza perdida”.
“Tengo mucho respeto por lo que ha hecho Blatter en el pasado, pero en los últimos años no hemos visto esa reforma tan necesaria. Es el momento de dar la oportunidad a otros”, afirmó.
“Hay que reformar la FIFA y recuperar la confianza perdida, no solo de los aficionados y las federaciones, sino también de los socios y los protagonistas en este deporte. Debemos mandar un mensaje claro y mostrar que tenemos un plan a largo plazo, creado por todos los que participan en este juego”, concluyó.