El titular de Deportes recalcó que el Gobierno “tomará todas las medidas necesarias para completar la legislación, muy incompleta, con el objetivo poner fin a la violencia”.
Las medidas que propone Kondonís como la entrada electrónica, que permite conocer la identidad del comprador y su ubicación en el estadio, la eliminación de las peñas de los clubes y la colocación de cámaras de seguridad en los campos, ya están recogidas en la legislación griega desde 2002, pero no se aplican.
En una reunión que mantuvieron este martes los responsables de la liga griega, un miembro de la seguridad del presidente del Olympiacos, Evángelos Marinakis, agredió al vicepresidente del Panathinaikos, Vasilis Constandinu, según denunció el afectado.
“No podemos tolerar comportamientos como el de ayer en la reunión de la autoridad que organiza el campeonato de primera división. Todo el mundo puede darse cuenta del ejemplo que dan a la afición los líderes de los clubes cuando se comportan así”.
Kondonís condenó los incidentes del pasado domingo en que los aficionados radicales del Panathinaikos saltaron al terreno de juego durante el derbi ante el Olympiacos y lanzaron objetos y bengalas a los jugadores, lo que ha motivado la suspensión del campeonato.
Minutos antes de que empezase el encuentro unos cincuenta seguidores del Panathinaikos invadieron el campo del Apóstolos Nikolaidis Stadium, su estadio, y lanzaron objetos a los jugadores del Olympiacos que empezaban el calentamiento de la que fue la vigésima quinta jornada de la Liga de Grecia.