“Orden y progreso.” El lema de Brasil, presente en su bandera verde, amarilla y azul, se puede aplicar desde principios de año a la defensa parisina.
El orden es que Thiago Silva haya recuperado su nivel de juego después de meses de dudas y dolores, entre el naufragio de la Seleçao en su Mundial y su lesión en el muslo en agosto.
Con dificultades en las primeras semanas tras su regreso, el antiguo milanista tomó impulso en este 2015, hasta el punto de volver a ser “O Monstro” después de varios partidos. El ‘monstruo’ defensivo capaz de tirar del equipo hacia delante.
“No fue fácil, tuve muchas críticas. No es fácil volver a encontrar el punto adecuado de forma. Sin embargo, ahora estoy jugando bien, tenemos confianza y motivación”, dijo Silva después de ganar al Toulouse hace quince días.
De nuevo en la lucha por la Ligue 1, el capitán brasileño espera dar un paso más. Contra el Chelsea, querrá revancha. En la pasada temporada, concedió un penal en el encuentro de ida, mientras que la vuelta en Stamford Bridge fue todo un sufrimiento para él.
El orden es también lo que hace que Maxwell sea el dueño de la banda izquierda parisina. Modelo de constancia y regularidad, el lateral ha superado sin dificultad la competencia del prometedor Lucas Digne y pronto debería renovar su contrato con el PSG.
Maxwell también querrá vengarse ante los Blues. El año pasado, fue a él a quien superó el delantero senegalés Demba Ba para anotar el 2-0 en Londres, lo que significó la eliminación para el PSG.
La racha de Marquinhos
El progreso es lo que simboliza a los otros dos jugadores de la defensa: David Luiz y Marquinhos.
La vuelta del italobrasileño Thiago Motta tras lesión debería retrasar a David Luiz hasta su puesto de defensa central frente a sus antiguos compañeros. Su extécnico en el Chelsea, el portugués Jose Mourinho, no confiaba mucho en el brasileño cuando le hacía jugar de central.
Laurent Blanc, que conoce bien el puesto de defensa central, ve las cosas de manera diferente. “Tiene la técnica de un mediocentro y la habilidad de un atacante frente al arco. Podría jugar en cualquier lugar. Pero, no hay muchos centrales con las cualidades de David Luiz”, juzgó el entrenador parisino.
David Luiz llega en plena forma para enfrentarse al Chelsea. Goleador en los dos últimos encuentros ante Mónaco y Lens, parece haber encontrado el punto óptimo de rendimiento tras una primera parte de la temporada simplemente correcta.
Sin embargo, sin duda el mayor progreso lo experimentó Marquinhos, que a sus 20 años alcanzó la primera plana del fútbol mundial.
A menudo sin sitio con la vuelta de Thiago Silva y el nivel de David Luiz. “Tengo a dos monstruos delante de mi”, estimó. Marquinhos encontró la solución, desplazarse al puesto de lateral derecho, en donde parece haberle ganado la partida al holandés Gregory Van der Wiel.
El exjugador de la Roma parece tener algo de talismán con una serie de 30 partidos invictos cuando juega esta temporada. Preguntado en zona mixta sobre esta estadística después de la victoria contra Mónaco, sonrió tímidamente: “Está bien, no lo sabía”.
Pero, tras dar unos pasos se giró y preguntó: “¿De quién es el récord?” Es del liberiano George Weah, con 33 partidos en 1993/1994. Si Marquinhos quiere romper el récord deberá lograr que el PSG conquiste Londres.