La prueba se realizó en la Ciudad Deportiva Joan Gamper, Messi no tuvo dificultad para superar al portero gigante que movía sus brazos, y que dejaba muy poco espacio para que el balón ingresara.
Para Messi parece que no hay nada imposible, colocó el balón en el punto de penal y remató en los ángulos que dejaba libre el guardameta inflable. Con la prodigiosa zurda, Leo aplicó el refrán, “donde pone el ojo pone la bala”, y los balones ingresaron con facilidad.
La destreza del delantero azulgrana quedó en evidencia una vez más y disfrutó un nuevo reto que ha marcado como superado. No es la primera vez que la televisión japonesa pone a prueba al delantero argentino, ya que este tipo de evento arranca los aplausos de los nipones, que son los llamados seguidores número uno del crac.
Por arriba, por abajo o por los costados, así fue como Lionel Messi hizo que el balón se fuera a las redes.