Previo a su participación en las justas olímpicas de Río, Neymar y Rafinha hicieron un pacto, de que si conquistaban el oro olímpico se tatuarían el logro para recordarlo por siempre.
Reviviendo la semifinal de la Copa del Mundo del 2014, cuando Brasil cayó estrepitosamente 1-7 frente a Alemania, los jugadores de la Selecao pudieron sacarse la espina en la final olímpica, al ganar en la tanda de penaltis a los alemanes, para conseguir la única medalla que le hacía falta Brasil en el deporte rey en su país.
Neymar que también se tiñó el cabello de rubio en honor a la presea dorada, afirma en una entrevista con el Barcelona que aún no le ha calada que ganaron la medalla pero que en el futuro verán como cumplieron su sueño.
“Me hice el tatuaje después del partido. He cumplido un gran sueño mío, de mi familia, de los compañeros y de los brasileños”, refiere Neymar.
Ney luce el tatuaje en la muñeca. Mientras que Rafinha, lo hizo en la parte de atrás del brazo.
