Silva y Luiz han sido de los pocos jugadores que a criterio de la opinión pública brasileña salvaron un poco la imagen del país sudamericano en su mundial.
“Quería ver a la gente sonreír” señaló Luiz al terminar el juego por el tercer lugar ante Holanda, “hay que levantar la cara y seguir hacia adelante” añadió.
Por su parte Thiago Silva señaló que se sintió frustrado al no poder jugar ante Alemania y que están en deuda con toda la gente Brasileña.