El colombiano de 24 años nacido en Turbo, en el departamento de Antioquia, y criado en la vecina Chigorodó, aseguró que con la plata, nunca obtenida por un boxeador colombiano, le ha quedado “como una espinita” que solo se puede sacar en los Juegos de Tokio 2020.
“Ahora solo pienso en Tokio, porque quedé como 'picao' por no tener la medalla de oro luego de estar tan cerca y no lograrlo, por eso (a Tokio) voy por la de oro”, enfatizó el deportista.
Yuberjen no tuvo un camino fácil en Río en donde debutó ante el local Patrick Lourenco al que derrotó por votación unánime, lo mismo que al medallista mundial filipino Rogen London y luego eliminó al español Samuel Carmona y al campeón mundial cubano Joahnys Argilagos en apretadas decisiones de 2-1.
Pero llegó la disputa por la medalla de oro frente al uzbeko Hasanboy Dustamov y aunque Martínez dio todo sobre el cuadrilátero no pudo superar a su rival que fue el que finalmente se colgó la presea dorada.
“Yo me sentí un poco ganador, pero bueno la decisión es de los árbitros, son ellos los que juzgan y no puedo juzgarlos a ellos”, comentó el colombiano con algo de resignación.
Sin embargo, cuando Yuberjen se detiene a analizar lo alcanzado por el boxeo colombiano en Río y los 28 años que pasaron para volver a ganar una medalla olímpica, reconoce la importancia de su medalla y la de su compatriota Ingrit Valencia quien ganó una presea de bronce.
“Hacía mucho tiempo que no se venían dando esos resultados y hoy estamos haciendo historia, y la verdad eso me pone muy contento”, comentó.
Yuberjen mencionó incluso la participación de Ceiber Ávila, quien en una cuestionada decisión perdió ante el ruso Misha Aloian la posibilidad de ganar otra medalla en los 52 kilogramos.
“Lo de Ceiber sí fue un descaro, hemos llorado, nos hemos erizado bastante con esa pelea porque fue un verdadero descaro”, afirmó.
Martínez sabe que por todo eso es necesario seguir trabajando y preparándose para que su deporte continúe teniendo puestos destacados en los Olímpicos.
“Somos conscientes de eso, de prepararnos muy bien, de corregir los errores y fortalecer nuestros puntos fuertes para poder llegar a Tokio mejor de lo que estuvimos en Río 2016”, aseguró.
Hasta los Juegos de Río, Colombia había ganado tres medallas de bronce en los Olímpicos, con Alfonso Pérez y Clemente Rojas en Múnich 1972, y con Jorge Eliécer Julio en Seúl 1988.
La medalla de plata de Martínez, además del orgullo que eso le representa, le permitirá tener una casa propia para su familia en Chigorodó.
“Estuve hablando con la ministra de Vivienda, Elsa Noguera, y ella se comprometió con eso, y quiero agradecerle porque desde que se supo que no tenía hogar, que no tenía casa, ella se pronunció. Incluso hoy estuvo en la casa, me llamó mi mamá a decirme que estaba allá, en Chigorodó”, manifestó el boxeador.
Luego de tomarse unos merecidos días de descanso, Yuberjen Martínez empezará su entrenamiento pensando siempre en el oro que espera ganar en Tokio.
“Hemos demostrado que tenemos talla mundial, por eso necesitamos competir por fuera, y si se nos dan las cosas, estar en una serie mundial como es la WSB (Serie Mundial de Boxeo), por eso estamos pidiendo apoyo para ver si nosotros tenemos nuestra propia franquicia, esperemos que eso se de”.