Pero se negó a prometer la continuidad de una serie de recortes presupuestarios y reformas exigidos por la eurozona en 2010 a cambio de préstamos, a los que Grecia atribuye el derrumbe de su economía. Alemania se apresuró a responder que el plan era insuficiente.
El vocero del Ministerio de Finanzas alemán, Martin Jaeger, dijo que “no es una propuesta sustancial para una solución”.
Agregó que equivale a un pedido “de financiación puente sin cumplir los requisitos del programa” , específicamente las medidas
presupuestarias.
Agregó que no se corresponde con lo que los países de la eurozona habían exigido a Grecia antes que las conversaciones se interrumpieran el lunes.
El primer ministro Alexis Tsipras mantuvo una conversación telefónica de 50 minutos con la canciller federal alemana Angela Merkel ayer por la noche.
Un funcionario griego dijo que fue un diálogo “en un clima positivo orientado a buscar una solución mutuamente beneficiosa para Grecia y la eurozona”.