Además de un recorrido educativo que pasará revista a la historia del chocolate y del cacao, el museo propondrá demostraciones, talleres de cocina y degustaciones
El lugar elegido para su establecimiento es un conjunto de antiguos inmuebles que, según el concejal de urbanismo de Bruselas, Geoffroy Coomans de Brachne, tienen un gran potencial, por su excelente ubicación.
“Se encuentra (…) en pleno recorrido turístico: todos los visitantes pasan por esta calle, que une la Grand-Place y el Manneken-Pis. Este proyecto supone un gran valor para el barrio” , añadió.
Las autoridades locales pretenden acelerar los procedimientos urbanísticos para poder poner en marcha el proyecto cuanto antes.
La capital belga cuenta ya con el Museo del Chocolate de Bruselas, un pequeño espacio en una estrecha casa cercana a la Grand-Place y con la Ciudad del Chocolate, situada junto a la basílica de Koekelberg, un proyecto innovador pero fuera del circuito turístico.
El promotor de la iniciativa es Eddy Van Belle, presidente del consejo de administración de Puratos, el mayor suministrador mundial de materias primas para pastelerías, panaderías y chocolaterías, que ya ha impulsado otros museos del chocolate en el pasado, el primero de los cuales abrió en Brujas (Bélgica) , en 2004.