“China actúa ahora de manera diferente con los países sudamericanos. Ya no mira sólo la compra de materias primas, hoy quiere entrar en las inversiones de la industrialización”, aseguró Gabriel Dabdoub, presidente de la Federación de Empresas de Santa Cruz, motor económico de Bolivia.
Uno de los países con mayor atraso y pobreza en Sudamérica, pero con un crecimiento vigoroso de más de 6% los últimos años, Bolivia proyecta, al igual que otras naciones del área, importantes obras de infraestructura que están bajo la mirada de la potencia asiática.
“China está interesada en las grandes obras de industrialización que necesita Bolivia los próximos 10 años y que tienen un costo calculado de US$42 mil millones ” , dijo Dabdoub.
El líder empresarial señaló que las empresas chinas han expresado su interés en la construcción de un ferrocarril de Bolivia a Brasil, que una el Atlántico y el Pacífico, además de carreteras y emprendimientos de conexión fluvial.
En mayo último el canciller chino, Wang Yi, se refirió al objetivo de Pekín por invertir más en infraestructura en América Latina. En Brasil el interés de China se centra en grandes licitaciones para adquirir vías férreas, construir carreteras y generación eléctrica, dijo.
El presidente de China, Xi Jinping, llegará a Brasil después del Mundial y lanzará junto a mandatarios de la región una reunión China-Celac —la comunidad de 33 Estados latinoamericanos y caribeños— que se celebrará a fin de año, en una nueva fase en la cooperación de China y América Latina”.
Préstamos
Apoyo a la región
China ha otorgado US$102 mil 200 millones en préstamos a América Latina entre el 2005 y el 2013, especialmente a Venezuela y Argentina, mientras países como México aumentan sus contactos con Pekín, según un estudio presentado en abril por el Global Economic Governance Initiative, de la Universidad de Boston.
México está abriendo su legislación petrolera y China “quiere ser un actor importante” allí, señaló ese informe, que coloca a Pekín como el principal músculo financiero de América Latina, por encima del Banco Mundial, Estados Unidos o el BID.
En el 2013, los préstamos chinos a gobiernos, empresas estatales y firmas privadas en América Latina sumaron US$20 mil 100 millones.
“Hoy China está desplazando a socios tradicionales de la región, como Europa y Estados Unidos, en inversión y comercio”, destacó Gary Rodríguez, presidente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior.