Carla Caballeros, directora ejecutiva de la Cámara del Agro, señaló que “en las áreas urbanas las personas se alimentan mejor”.
El consumo promedio por familia de productos básicos como frijol, maíz, harina de trigo y azúcares es de Q3 mil 903 a escala urbana, mientras que en el área rural es 15% menor y se calcula en Q3 mil 370. En el caso del consumo de carnes de res, pollo y cerdo, la diferencia es mayor. En el área urbana una familia consume al año Q3 mil 440, pero en el área rural es 30% menos y solo dedican Q2 mil 645 a ese rubro.
Tendencia natural
El mercadólogo César Tánchez refirió que es natural que los mayores consumos de alimentos se registren en las zonas urbanas, porque es allí donde están ubicadas las grandes fuentes de trabajo y la población tiene una exposición más grande y directa a la publicidad de los medios de información que influencian el consumo.
Mientras que en las áreas rurales de la provincia este tipo de influencia es mucho menor, debido a que en la mayoría de los casos ni siquiera tienen televisión.
El consumo de los productos lácteos y quesos por familia en el área urbana es calculado en Q1 mil 453 anuales, mientras que en área rural es 37% menos, con solo Q1 mil 062.
Por aparte, Tánchez aseguró que el tipo de trabajo es un factor importante en los alimentos que se consumen, ya que esto tiene que ver con el poder adquisitivo.
Además, indicó, se debe tomar en cuenta que la población de las áreas urbanas le da el valor agregado a lo que, paradójicamente, se produce en la provincia.
En el caso de las frutas y verduras la tendencia es similar y las familias en el área urbana consumen entre 23% y 21% más que las rurales
Pedro Prado, analista de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes), expuso que en teoría en la urbe hay más oportunidades de conseguir un empleo y de obtener más ingresos, por lo que la pobreza se caracteriza por ser propia del área rural.
Según el estudio, el consumo total de productos del agro suma más de Q33 mil 500 millones.
Además
Gasto
per cápita
El informe revela que el consumo per cápita de granos básicos como frijol, maíz, harina de trigo y azúcares es de Q690.
El consumo de frutas per cápita a escala nacional es de Q379.
En el caso de las carnes de cerdo, pollo y res, la ingesta per cápita es de Q591.
Además, en el consumo de huevos y productos lácteos son Q241 los que se erogan per cápita.
El consumo de verduras per cápita es de Q316.
Frase
“En las áreas urbanas las personas se alimentan mejor porque hay poder adquisitivo mayor y compran productos más caros”.
Carla Caballeros, directora ejecutiva de Cámara del Agro.
Capacidad de compra
La Cámara del Agro realizó un diagnóstico del consumo de carnes, productos lácteos, granos, verduras y frutas.
El consumo total de productos relacionados con el agro es de más de Q33 mil 500 millones.
Los productos básicos de consumo familiar en el país alcanzan los Q9 mil 511 millones anuales en total.
Del total de carne ingerida en el país, el 33% se da en el departamento de Guatemala.
La carne consumida por las familias en Guatemala alcanza los Q9 mil 342 millones anuales en
total.
La ingesta de lácteos y quesos en el país llega a Q3 mil 692 millones al año.
Al año las familias guatemaltecas comen Q5 mil 914 millones en verduras.
En frutas el consumo al año alcanza los Q5 mil 75 millones anuales en todo el país.
La demanda de los productos del agro se da en 33% en el departamento de Guatemala. Quetzaltenango y Huehuetenango son los otros dos más consumidores.