La última vez que se tuvo que recurrir a este tipo de medidas fue en el 2009, luego de los efectos de la crisis económica mundial. El Gobierno de ese entonces tuvo que recurrir al endeudamiento para soportar el viento en contra.
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Uno de los objetivos de esta medida, es que el gasto público estimule la inversión privada.
Las 5 propuestas
El ministro de Finanzas, Álvaro González Ricci explicó que un equipo del Gabinete Económico estudia las medidas de reactivación, las cuales tendrían varios enfoques, pero este lunes aún se encontraban en estudio.
“Se están preparando las estrategias económicas para incentivar la economía; evaluar cuáles son las que tienen que ir al Congreso y cuáles se pueden readecuar”, puntualizó el funcionario.
En términos generales, el ministro resaltó un pliego de acciones para reactivar la producción, que estarían estimuladas con un mayor aporte de gasto estatal para cada una de esas áreas.
Se plantea:
- Maniobrar la Política Monetaria, Cambiaria y Crediticia para incentivar la inversión
- El financiamiento para las pequeñas y medianas empresas por medio de un fondo de garantía con el Crédito Hipotecario Nacional (CHN)
- Un aporte para la creación de un fondo de vivienda popular con el Instituto de Fomento de Hipotecas Aseguradas (FHA) y la Municipalidad de Guatemala.
- Definir los proyectos a ejecutar por el Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda (CIV) en obras estratégicas
- Promover el portafolio de proyectos de inversión bajo el concepto de Alianza Público-Privada.
“La reactivación económica dependerá de cuánto el Estado pueda invertir”, aseveró el ministro.
Sobre la solicitud de ampliación presupuestaria al Legislativo, el monto será de Q6 mil millones aproximadamente, subrayó González Ricci.
Mencionó que para la emergencia del covid-19 cuentan con la disponibilidad de Q230 millones del fondo de emergencia en el presupuesto, así como la aprobación de un préstamo contingente de US$200 millones –Q1 mil 540 millones–, que se encuentra en gestión en el Congreso.
Obra pública para empujar la economía
En momento de crisis la inversión en infraestructura puede reducir los impactos negativos a la producción y el Gobierno deberá de tomar las decisiones del gasto público, expresó Óscar Erasmo Velásquez exministro de Economía, al recodar la experiencia del 2009.
“Lo mejor es intensificar los proyectos que se tenga programados en infraestructura para compensar los efectos en la inversión privada. Con una disposición se puede neutralizar el efecto negativo que pudiera darse en los capitales privados”, subrayó.
Juan Carlos Zapata, director ejecutivo de la Fundación para el Desarrollo (Fundesa), dijo que se tiene que visualizar una reactivación económica una vez se atiendan los casos de coronavirus.
“Mucha de la parte de la reactivación económica podría ser en infraestructura que genera empleo, la productividad para otras actividades, las cadenas de servicios y el turismo”, recalcó.
Shock externo
Las variables macroeconómicas tendrán un cambio a las que se plantearon a principios del ejercicio, precisó David Casasola, analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (Cien), como la inflación, el crecimiento económico, comercio exterior o el crédito.
“En ningún momento se había modelado un shock negativo a lo que estamos siendo testigos para la economía y no se había incorporado el efecto a la baja”, sostuvo el investigado.
Los efectos serán generalizados, tanto para Guatemala como para otros países.
Un primer impacto podría ser la caída en la actividad económica y un menor desempeño del que se tenía previsto.
En todo caso, dependerá de la duración y la magnitud del coronavirus y pueda haber escenarios que sean un impacto corto o permanente, añadió Casasola.
Velásquez recordó que la dependencia de la economía de Guatemala por el lado del comercio exterior es de Estados Unidos y de Centroamérica.
Avalan programa
Los diputados Carlos Barreda y Édgar Stuardo Batres, coincidieron en que la recuperación de la economía puede venir de las medidas que adopte el Gobierno, así como otras iniciativas que acompañen a una recuperación formal de la producción.
Los primeros efectos son para el sector turismo, pero podrían aprobarse estímulos para la infraestructura vial, vivienda y movilizar recursos al CIV para que acelere su ejecución, señaló Barreda, como compensadores inmediatos. Otro componente, sería en el área de agricultura familiar.
Batres dijo que se deben hacer regulaciones temporales que brinden respiro a la población, en moratorias en el sector bancario o alguna compensación económica adicional a los trabajadores, mientras se supera la crisis, pero dependerá de la voluntad de los agentes productivos.
Barreda mencionó que se deben discutir por lo menos tres regulaciones temporales para los pequeños y medianos empresarios que es el sector más afectado en este momento, en las áreas financieras, compromisos laborales y las obligaciones fiscales.
Reiteró que se propondrá la aprobación de la iniciativa de ley de insolvencias, que permite generar acuerdos flexibles y que las empresas no cierren por la acumulación de deuda en estos momentos.
