En toda la región, desde la Patagonia a México, donde el gobierno lanzó una histórica reforma petrolera, el nerviosismo es palpable.
Se están abandonando proyectos de perforación que proliferaron durante la última década y el Bank of America redujo de 1.8% a 1.3% su previsión de crecimiento este año para la región.
CASOS
En Colombia, la producción de petróleo se había duplicado los últimos siete años hasta llegar al millón de barriles diarios.Colombia llegó a ser el quinto mayor proveedor de Estados Unidos.
Impulsada por la producción de petróleo casi récord, su PIB creció un 4.8% el pasado año, el ritmo más rápido entre las principales economías de América Latina.
Las regalías llovieron entonces sobre municipios como Puerto Gaitán, multiplicando por 100 su presupuesto en poco tiempo, lo que trajo consigo un frenesí de proyectos de construcción como escuelas, una biblioteca del tamaño de un campo de fútbol y una espectacular bóveda acústica.
El sindicato de la industria petrolera USO dice que cerca de 7 mil trabajadores han perdido sus trabajos en las últimas semanas debido a que la firma Pacific Rubiales congeló inversiones.
A nivel nacional, el Ministerio de Trabajo calcula que unos 25 mil trabajadores del petróleo, una cuarta parte de la fuerza laboral de la industria, podrían perder sus puestos de trabajo.
También el gobierno está acusando el golpe tras la caída en los precios del barril, pues las exportaciones de crudo llegaron a financiar un 15% del gasto público.
Pese al desalentador panorama colombiano, Venezuela es donde más se siente el impacto del derrumbe de los precios del petróleo ya que el 95% de los ingresos del gobierno socialista de Nicolás Maduro era generado por la exportación de crudo.
También está en riesgo, dicen los analistas, Ecuador, quien es miembro de la OPEP y que tuvo que pedir un crédito de US$7 mil 500 millones a China para enfrentar la crisis.