El paso dado por la Fed inicia una serie de aumentos de las tasas que el comité de política monetaria del organismo prometió que será “gradual” y acompañará el ritmo de la economía.
Hacia fines de 2016 las tasas deberán estar en el orden del 1.4%, dijo el FOMC en el comunicado que cerró dos días de deliberaciones.
“Es el fin de un período excepcional durante el cual las tasas fueron mantenidas cerca de cero para sostener la recuperación”. Yanet Yellen, presidenta de la Fed
La decisión era esperada en todo el mundo desde que Estados Unidos confirmó que crece lenta pero sostenidamente.
Fin del dólar barato
La Fed cerró así una era en la que inyectó billones de dólares baratos en la economía estadounidense a fin de fogonear la recuperación provocada por la mayor crisis económica desde los años 30.
“Esta decisión marca el fin de un período excepcional de siete años durante el cual las tasas fueron mantenidas cerca de cero para sostener la recuperación” tras la crisis de 2008-09, dijo Yanet Yellen, presidenta de la Fed.
“Ella consagra también los considerables progresos hechos para reorientar el empleo (…) y aliviar las dificultades económicas de millones de estadounidenses”, dijo.
En los últimos meses, el FOMC se mostró reticente a subir las tasas debido a que, como la propia Yellen lo admitió a principios de este mes, la inflación estadounidense es aún débil y el mercado laboral muestra morosidad.
En ese contexto varios economistas prominentes como Larry Summers y Paul Krugman se preguntaban porqué ahora la Fed habría de cambiar su política ultraexpansiva.
No obstante, el FOMC fue unánime este miércoles y destacó que en el último año hubo “considerables” mejoras en el empleo. Además dijo estar “razonablemente confiado en que la inflación crecerá en el mediano plazo hacia el objetivo de 2%”.
Porcentuales aumentó la tasa de interés.
El FOMC decidió el aumento de las tasas “dado el panorama económico y reconociendo que es momento para acciones de política que influyan en los futuros resultados económicos”.
Impacto global
Aunque se aplican básicamente para préstamos interbancarios de muy corto plazo, la tasa directriz estadounidense sirve de base para las de plazos mayores en todo el sistema financiero.
Aumentarla significa incrementar los costos para los créditos en dólares que toman gobiernos, compañías y consumidores. Al mismo tiempo asegura ganancias mayores a los depositantes bancarios.
Para los países emergentes, varios de ellos con serios problemas como Brasil, puede cerrar casi una década de bonanza gracias al dolar barato. Los capitales que se refugiaban allí en busca de un rendimiento mejor pueden ahora orientarse hacia el billete verde acentuando los problemas actuales.
Jim O'Sullivan, economista jefe de High Frequiency Economics, estimó que las tasas subirán a mayor velocidad de lo que sugirió la Fed este miércoles.
“Seguimos escépticos en cuanto a que el ritmo de aumento será tan gradual como se sugirió, especialmente porque creemos que seguirá cayendo la tasa de desempleo y eventualmente eso puede agregar presión sobre la inflación”, dijo.