El foco se localizó en Tecpán Guatemala, Santa Apolonia y San José Poaquil, y zonas colindantes con el departamento de Quiché.
“Se enviaron seis mil vacunas para atender a los animales en los alrededores y se creó un cinturón para controlar el foco de rabia”, expuso el funcionario.
El ministro informó que hay una declaración de alerta por las diferentes clases de rabia que aparecen, atribuidas al cambio climático y que son transmitidas por murciélagos y perros contagiados.
Las brigadas de atención, explicó Marcucci, se extenderán a otras áreas donde hay crianza de ganado y equino.
El último caso de rabia fue detectado el 25 de abril del 2013 en Lívingston, Izabal, donde se registró la muerte de 50 animales.