Este colectivo “reúne todo el abanico social y económico de estas dos islas” , Ibiza y Formentera, su pequeña vecina a la que sólo se puede llegar en barco, explica.
Su mensaje es claro: “no es compatible la prospección petrolífera” con el archipiélago mediterráneo de las Baleares, del que forman parte estas islas.
Para oponerse a él, más de 10 mil habitantes se manifestaron a finales de febrero, en una movilización histórica.
Y encontraron un apoyo inesperado, el de los famosos que cada año vienen a disfrutar de sus aguas turquesas y su animada vida nocturna.
“Ibiza está en peligro”, se exclamaba la multimillonaria Paris Hilton en Twitter, donde tiene 12.6 millones de seguidores. Por su parte, la top-model Kate Moss posó junto a un cartel en el que se leía en inglés “¡Ibiza dice no!”.
El proyecto de exploración remonta a 2010, cuando el grupo escocés Cairn Energy obtuvo cuatro permisos para realizar prospecciones en torno a las islas Baleares y frente a las costas de Valencia, en el este de España. Si el ministerio de Medio Ambiente da su visto bueno, el proyecto podría concretarse en los próximos meses.