proyecciones macroeconómicas
La inflación en 2024 será estable y controlada, según el pronóstico del Banguat
La inflación en Guatemala se puede ver afectada por distintos factores y no todos son económicos. Para este 2024, los efectos del cambio climático también suman presión.
Con cierta tranquilidad y calma fue la conducta de las autoridades del Banco de Guatemala (Banguat) y Junta Monetaria (JM) que expusieron en conferencia de prensa el desempeño de la inflación para 2024, y en la cual recalca que se mantendrá bajo control, en alrededor del 4% que es el rango meta, y que la pronostico ya integra algunas variables observadas, sobre todo lo relacionado a los posibles efectos del cambio climático en específico por los impactos del fenómeno de el Niño o la Niña.
El panorama de la inflación para este año fue expuesto el pasado miércoles 21 de febrero, luego que la JM decidiera mantener en 5% la tasa de Interés Líder de Política Monetaria, en su primera sesión celebrada en el año. En 2023 la inflación cerró en 4.18% y en enero de este año fue de 3.82%, lo que significa una fuerte disminución.
LECTURAS RELACIONADAS
¿Qué expectativas hay para los siguientes 12 meses sobre la inflación?, las autoridades hicieron un repaso de lo que puede venir para lo que resta del 2024, fundamentado en sus análisis internos.
Contexto internacional
Las autoridades detallaron que las perspectivas de crecimiento económico mundial, sobre todo de la economía de Estados Unidos, tuvo un desempeño mejor de los previsto en 2023, y aunque se preveía que la economía crecería a una tasa del 2%, concluyó creciendo 2.5%, y para 2024 podría crecer 2.1% en positivo.
En el caso de la zona del euro, solo creció 0.5% en 2023 y para 2024 0.9%, por lo que estará “muy por debajo del crecimiento mundial”.
En el bloque denominado como economías emergentes, destaca la participación de la República Popular de China, que logró un crecimiento del 5.2% para 2023, esto a pesar de un problema inmobiliario en su economía y la previsión para 2024 es de 4.6%, que también estaría asociado a las restricciones de ese sector.
En tanto que la economía de India muestra un desempeño muy dinámico ya que el año pasado creció 6.7% y 6.5% para 2024. Brasil, registró un crecimiento del 3.1% y para 2024 1.7% o sea una desaceleración y finalmente México logró una tasa del 3.4% el año pasado y 2.7% para este ejercicio.
La economía mundial estaría creciendo en 3.1% durante el 2023 y es el mismo porcentaje previsto para este año.
Variable sensible
El análisis para el precio del barril del petróleo -como materia prima para la producción de los derivados que se importan a Guatemala- y que es considerada como una variable sensible para la economía nacional al 20 de febrero registró un precio spot de US$78.18 en mercado WTI -petróleo intermedio de Texas- que es el de referencia para el país.
LECTURAS RELACIONADAS
Para 2023 el precio promedio de esta materia prima fue de US$77.63, y para el 20 de febrero último el promedio es de US$74.85, pero el precio promedio calculado para 2024, es de US$78.42, que sería un valor muy similar al de 2023.
El entorno interno
Otra de las variables que sustentan que la tasa líder de Política Monetaria se mantuviera en 5% fue el análisis de la situación local.
El primer indicador fue el cierre del crecimiento del producto interno bruto (PIB) de 2023 que fue de 3.5% y para 2024 se proyecta un crecimiento en el rango de 2.5 a 4.5% con un valor central o núcleo de 3.5% que se mantiene.
Para diciembre del 2023, el índice mensual de la actividad económica (Imae) fue que confirma que de 3.5%, que es el valor acumulado de la serie. Mientras que el índice de confianza en la actividad económica (Icae) mostró una recuperación de 57.80 puntos a enero último, lo que anticipa una expansión económica para los próximos seis meses.
En tanto que las divisas por remesas familiares cerraron el año pasado por US$19 mil 804 millones, y para el 15 de febrero último el registro acumulado es de US$2 mil 250.3 millones, que significa un crecimiento del 5.6% con respecto al mismo periodo del año pasado, que estaría incrementándose en el resto del periodo para cerrar a diciembre del 2024 en 9.5% para acercarse a unos US$21 mil 685.4 millones.
En tanto que el crédito bancario al sector privado se ha mantenido con un desempeño dinámico y al 15 de febrero reportada un crecimiento del 15.6%, pero se pronostica una disminución gradual para el resto del año para situarse en un rango de 9% a 12% respectivamente.
"El crecimiento del producto interno bruto (PIB) en 2023 fue de 3.5% y para 2024 se proyecta en un rango de 2.5 a 4.5%"
Informe Banguat
De esa variable, el mayor dinamismo está para el segmento del crédito empresarial mayor con 14.3%, pero el reporta una desaceleración es el crédito al consumo con 21.6% -a esa fecha- pero todavía viene creciendo fuerte, y el crédito hipotecario con 8.2%, “todo esto ha ocurrido en un entorno cuando las tasas de interés se han mantenido con una leve tendencia a la baja”, se expuso.
Con respecto a las tasas de interés -promedio ponderado- a diciembre del 2023, para el segmento empresarial mayor es de 6.74%; empresarial menor 9.61% y para hipotecario par la vivienda 8.75%.
Expectativas de la Inflación
Con lo observado en la inflación en enero último, que fue de 3.82% que es una reducción al 4.18% de diciembre “con ese valor se estima que la inflación estaría cerrando en 4% para 2024”, expusieron las autoridades.
Las expectativas de inflación están ancladas a la Política Monetaria que es de 4% más/menos 1%, que sitúan la inflación a 4.47% para los siguientes 12 meses y 4.29% para 24 meses, según el análisis técnico.
Los factores que mantiene tasa líder en 5%
Álvaro González Ricci y José Alfredo Blanco Valdés, presidente y vicepresidente del Banco de Guatemala (Banguat) y de la JM, así como Johny Gramajo, gerente económico, justificaron del porque se mantiene la tasa Líder de Interés de Política Monetaria.
Explicaron que cuando se analizó los factores externos, es relevante que en el contexto del crecimiento económico mundial ha sido mejor de lo previsto, por lo que “no hay indicios de recesión o la probabilidad de una recesión se han reducido, pero hay una probabilidad de situaciones que tienen que ver con materias primas, que los precios del petróleo dejaron de bajar, y que comienza a subir este año, y que subirá un poco más en lo que resta del año, y por ese lado se podrían ver algunos precios internos, por lo que se hace aconsejable, que desde el punto de vista externo, no se disminuya la tasa Líder de Interés de Política Monetaria”.
Por otro lado, está que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) a anunciado que la tasa de interés la va a disminuir “de manera más gradual de lo previsto”, y para marzo próximo en su revisión del indicador, no se anticipa ninguna reducción “y a nivel internacional no se está observando reducciones significativas en el primer semestre del año”.
En el aspecto interno, se expuso que todavía el crédito al consumo, “relativamente está alto creciendo a doble digito más del 20%, pero se ha venido desacelerando, y por ese lado aún hay riesgos que pueda haber presiones inflacionarias, tomando en consideración que el consumo es el principal componente a nivel de la demanda agregada que en el PIB representa el 90%”.
También, las expectativas de inflación ayudan a que se mantengan la tasa de interés Líder entorno al 5%, “que hace sostenible una meta de inflación del 4% en el mediano y largo plazo, pero hay factores internos y externos que modifican desde el punto de vista prospectivos de la Política Monetaria esa apreciación a que se mantenga a cualquier evolución afectar la trayectoria de la inflación en el futuro”.
Cambio climático
Al hablar sobre las implicaciones que puede tener en la inflación el fenómeno de el Niño, dentro de las estimaciones oficiales que se hacen, se evalúan las condiciones meteorológicas, los pronósticos de inflación, por lo que se toma en cuenta tanto el fenómeno de el Niño como de la Niña tiene incidencia sobre las cosechas.
Al respecto se comentó que un fenómeno de el Niño más fuerte de lo normal genera sequía y por lo tanto un desabastecimiento en el mercado interno, en los productos agrícolas, que termina elevando de precio algunos productos. El fenómeno de la Niña lo que hace, es que, con el exceso de las lluvias se dan las pérdidas de las cosechas, que también termina afectando los precios.
La injerencia del fenómeno de el Niño podría extenderse hasta mediados de este año, con la información externa que posee la JM, y en la segunda parte de el año el fenómeno de la Niña empezaría a tener injerencia.
“Ya hay injerencia y se esperaría condiciones de menor producción en ciertos cultivos que tienen que ver más con sequía y elevar los precios de algunos bienes. Ahí está incrementos en los precios medios del tomate, incremento en los precios medios de la cebolla, incrementos del precio medio del aguacate, por ejemplo, que son por razones de elevación de costos y no tan al fenómeno meteorológico en particular. Las cosechas que, si tienen que ver directamente aumentan de precio más fuerte, y otros bienes aumentan como consecuencia de un efecto de segunda vuelta de los que, si fueron afectados directamente por las condiciones climatológicas, que ya están incluidos en las previsiones de inflación”, apuntó Gramajo.
Por esa razón las proyecciones tienen un limite superior y un límite inferior, se concluyó.