Este tipo de obras no concretadas, indicó la Cámara, “tienen un alto impacto en el mejoramiento de la circulación”, tales como pasos a desnivel y rotondas en al menos cinco puntos.
“Instamos al Gobierno Nacional a retomar el plan de viabilidad, licitando estos proyectos que contribuirán a mejorar la circulación vehicular”, dijo la organización patronal en una declaración pública.
La Cámara añadió que debe aumentar el número de inspectores de la Autoridad del Tránsito y Transporte Terrestre “que realmente hagan cumplir la Ley” .
Estos cambios, sumados a “una atención genuina del transporte público con visión a largo plazo”, permitirá una mejor calidad de vida “a quienes hoy pasan largas horas fuera de sus hogares, a la vez que disminuirá los costos que representan para el sector privado”.
La Cámara basa su petición en el crecimiento “a velocidad vertiginosa” del parque vehicular, frente al lento desarrollo de calles, estacionamientos y número de inspectores de tránsito.
Panamá cuenta con una flota de metrobús que promete ser administrada por una empresa británica, First Transit, después de que el Gobierno compre la empresa a su actual operadora en meses venideros.
La ciudad también tiene una línea de metro de 16 kilómetros, que inició su apertura en abril de 2014, y trabaja en la Línea 2, que estará lista en diciembre de 2018 según las autoridades, y prevé beneficiar a 500 mil personas en su trayecto de 21 kilómetros hacia el este de la ciudad.
Esta construcción forma parte de los planes del Gobierno de Juan Carlos Varela de crear un sistema de transporte integrado, que conecte las líneas de metro y autobús y que ayude a aligerar el tráfico en la capital, ya que en hora pico los atascos pueden llegar a durar hasta 3 horas.