De acuerdo con información proporcionada por Fernando Prera, director de la Unidad de Comunicación del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Alimentación (Maga), la producción esperada para el próximo año de maíz oscila entre los 34 a 35 millones de quintales, y de frijol alrededor de 4 millones de quintales.
Aunque con esas proyecciones el Maga espera una producción de granos superior a la del 2011, según las estimaciones de la FAO el nivel de cosecha se mantendrá similar a la de este año, e incluso con déficit.
“La producción de maíz este año se estima en 35 millones de quintales, y el requerimiento para el consumo nacional es de 40 millones de quintales; la cosecha de frijol se prevé en 3.9 millones de quintales, y la necesidad para el abastecimiento interno es de 4.2 millones de quintales”, refirió García.
menos áreas
Si bien los niveles de producción de frijol y maíz estarán estrechamente relacionados con los regímenes de lluvia, el acceso a semilla de calidad y a insumos, uno de los factores que será determinante en el comportamiento de la cosecha nacional, es la reducción de áreas de cultivo.
“Para el próximo año las familias de infrasubsistencia y subsistencia —oriente y occidente— sembrarán igual área que en años anteriores —en promedio 0.35 hectáreas por familia—, mientras que los medios y acomodados de la región norte cultivarán menos área —cinco hectáreas en promedio por familia—”, expresó García.
Según el experto, lo que ayuda al país es que en los últimos años ha mejorado el nivel de rendimiento de cosecha, que en maíz alcanza los 36 quintales por hectárea, y en frijol, 18 quintales.
“De ahí que el mayor reto para el sector agrícola es apostarle y valorar la agricultura familiar de ladera —71% de los productores agrícolas nacionales— y son ellos quienes aportan más del 90% de la producción nacional de maíz y frijol en el país”, aseguró.
