También fue capturada la guatemalteca Magda Raquel López Rodríguez, en el sector 6, manzana L, casa 28 de residenciales Los Olivos, zona 18.
Los tres fueron ligados a proceso por la jueza sexta Penal, Silvia de León, quien resolvió que enfrentarán proceso por el delito de trata de personas —explotación laboral en aquel país—.
Carlos Menocal, ministro de Gobernación, indicó en conferencia de prensa que las víctimas eran golpeadas, sometidas a vejaciones y las obligaban a trabajar una jornada de cinco a 23 horas, con solo una comida al día.
Aparte, en lugar de pagarles los US$400 ofrecidos —unos Q3 mil 120—, les entregaban menos de US$5 —Q7.79—.
Una de las víctimas, que fue violada, regresó a Guatemala en estado de gestación, explicó el funcionario.
Menocal refirió que la investigación para ubicar a los responsables fue efectuada por los servicios de inteligencia guatemalteco y jordano. La intención era que el Ministerio Público (MP) tuviera suficiente documentación para solicitar las órdenes de captura.
Forma de operar
De acuerdo con las pesquisas, la banda hizo una publicación en medios, el 10 de mayo último, en la cual ofrecía altos sueldos a los interesados, quienes —en su mayoría de 20 años— entregaron su papelería a López, quien tenía una venta de ropa usada.
Los jordanos hospedaban a los futuros “empleados” en el hotel Reforma, ubicado en el mismo lugar donde estaba la venta de ropa. Después las sacaban del país rumbo Amman, Jordania, como turistas.
En apariencia viajaban bajo la responsabilidad de un grupo evangélico de Amman. Una vez las víctimas estuvieron en aquel lugar, las golpeaban y las mantenían en condiciones esclavizantes.
Representantes de la Unión de Mujeres Jordanas, que apoyó a Guatemala en las pesquisas, indicó que el referido grupo religioso no existe.
Diligencia
El MP aseguró que de mayo del 2010 a julio último, unas 22 personas fueron engañadas y enviadas a trabajar a Jordania.
Uno de los requisitos para obtener el “empleo” era saber cocinar, sobre todo platillos típicos guatemaltecos —chuchitos, atol y dobladas, entre otros—.
A las víctimas les advertían que debían decirles a sus familiares y amigos que irían de vacaciones a Israel, para conocer Tierra Santa, el lugar donde nació Jesús, y que al concluir esa visita se trasladarían a Jordania.
Según la documentación del MP, los connacionales en realidad viajaron directo a Jordania, donde fueron ofrecidos al mejor postor para supuestas labores domésticas.
“Algunos se creían dueños de las personas, al punto de afirmar que les pertenecían por dos años”, refieren las pesquisas efectuadas por fiscales.
El enlace
El MP logró establecer que el trabajo de los jordanos capturados era ser el enlace en Guatemala y enviar a los “trabajadores”.
Las víctimas denunciaron que tanto en el hotel Reforma como donde eran hospedadas en Jordania las mantenían encerradas.
Menocal informó que continúan las investigaciones, a través de la Cancillería, ya que necesitan averiguar si esta red tiene ramificaciones en otros países donde podría haber más guatemaltecos engañados.
El funcionario aseveró que de todas formas esto “fue un golpe importante contra una red de trata de personas a nivel internacional”.