Comunitario

Ayuda estatal sigue sin llegar a Panzós, el apoyo para niños con desnutrición aguda viene de asociaciones particulares

Los casos de niños con desnutrición aumentan en Panzós, la ayuda al municipio llega de asociaciones particulares. El gobierno es el gran ausente.

La desnutrición aguda acecha a la población infantil en Panzós, los casos van en aumento. (Foto Prensa Libre: Cortesía Passion Asociación)

La desnutrición aguda acecha a la población infantil en Panzós, los casos van en aumento. (Foto Prensa Libre: Cortesía Passion Asociación)

A 12 días de que se dio a conocer que Panzós, en Alta Verapaz, se encontraba en alerta anaranjada por el aumento de niños con desnutrición aguda y signos clínicos de Kwashiorkor el apoyo estatal a las comunidades no llega. La ayuda que han recibido los menores  y sus familias viene de asociaciones particulares y de personas individuales que se movilizaron al lugar para asistir con alimento y atención médica.

Tres organizaciones han llevado alivio al municipio, que se declaró en emergencia desde el pasado 23 de febrero. Equipos de la Pastoral Social Cáritas Diócesis de la Verapaz, World Vision y Passion Asociación se adentraron a las aldeas más vulnerables por caminos de difícil acceso, encontraron hogares con necesidades y más niños desnutridos.

Cuando Prensa Libre dio a conocer los casos de desnutrición en Panzós se reportaban 58 menores de cinco años con un cuadro agudo, hasta ayer ya eran más de 65 niños, entre ellos, casos severos que necesitan atención hospitalaria.

La semana pasada la Secretaría de Seguridad Alimentaria y Nutricional de la Presidencia (Sesán), en coordinación con el Ministerio de Salud, negó que hubiera una  alerta anaranjada en el municipio, pues para establecerla los casos de desnutrición hallados tendrían que superar el 5% del total de la población local. Se indicó que los datos reportados mostraban “una tendencia normal”.

Mark Arellano, médico y fundador de Passion Asociación, aseguró que la urgencia es real. “Tuvimos que referir a niños -al hospital-, porque estaban casi muriendo ante nosotros, estaban en un grado de desnutrición severo”, dijo, un día después de su visita a Panzós con un equipo de 22 voluntarios.

Entregaron 50 libras de alimento a 300 familias de Panzós y Telemán, repartieron multivitaminas, hierro y purificadores de agua.

Passion Asociación llegó a Panzós para ayudar a los niños con desnutrición crónica y a sus familias. (Foto Prensa Libre: Cortesía Passion Asociación)

La urgencia es real

La Sesán indicó que ya se realizaron “las gestiones de asistencia alimentaria correspondientes. Ahora está en manos de las instituciones ejecutoras el seguimiento”.

Sin embargo, la ayuda por parte de las entidades gubernamentales que deben atender el problema en Panzós no ha llegado.

“La situación de los niños es crítica, están en urgencia. Sí hay desnutrición, por aparte hay muchas enfermedades paralelas a estos casos. Hay niños con síndrome de Down”, mencionó Arellano, y entre el grupo que atendieron se encontraban dos niños con kwashiorkor, y uno más que le dieron de alta del hospital sin que estuviera recuperado.

Identificaron a 10 menores con un cuadro severo, de ellos un caso que debía ser trasladado de urgencia  a un centro de recuperación nutricional.

Las familias de Panzós recibieron dotaciones de alimento, multivitaminas y purificadores de agua. (Foto Prensa Libre: Cortesía Passion Asociación)

A criterio del médico el nivel de alerta en el municipio es necesario, sin embargo, las autoridades de gobierno ahora “se quieren echar para atrás”, sin considerar que la necesidad en el lugar es “real”.

Consultada la Sesán al respecto, mencionó que este es un tema que la propia municipalidad debe abordar.

“No importa si solo es un caso, no es una situación normal. No normalicemos los casos de niños con desnutrición, nosotros encontramos 10 casos severos”, dijo Arellano.

“Sí se necesita tener la alerta activa, no solo por lo que está pasando sino por lo que pueda pasar, esto viene a peor”, agregó, pues se aproximan semanas en que la crisis alimentaria amenaza con agudizarse en el valle del Polochic.

Llamado de auxilio

Carmen Reyes, coordinadora de la Pastoral Social Cáritas Diócesis de la Verapaz, contó que hace 20 días la Municipalidad de Panzós les hizo un llamado de auxilio porque habían encontrado más de 50 niños con desnutrición aguda y necesitaban apoyo.

Atendieron al requerimiento, lo primero fue entregar alimento y lo hicieron a unas 70 familias en riesgo. Pero Reyes y su equipo están conscientes de que la ayuda debe ir más allá, pues este es un sector en alta vulnerabilidad, las tormentas tropicales Eta e Iota y Julia destruyeron los cultivos y dañaron los terrenos para sembrar, y las fuentes de trabajo son escasas en la zona.

“Hay una crisis de inseguridad alimentaria, y hay que atenderla, de pronto con ayuda de alimentos, pero el problema no se resuelve dando comida, porque son problemas que deberían resolverse con desarrollo social integral”, refirió Reyes.

World Vision Guatemala también se movilizó a Panzós y llevó 40 raciones de alimento por un mes para las familias. La organización también confirmó el incremento de la cantidad de niños con desnutrición aguda y advirtió el agravamiento de la inseguridad alimentaria y nutricional en el municipio.

World Vision llevó alimentos a las familias con mayor riesgo de inseguridad alimentaria en Panzós. (Foto Prensa Libre: Cortesía World Vision)

El apoyo a las familias de Panzós no termina allí, Passion Asociación volverá al municipio el próximo 29 de abril, llevará un equipo más grande de voluntarios, unas 50 libras de alimento por familia, cargamento de multivitaminas, harán jornadas de desparasitación y entrega de hierro a la población. En los planes de Arellano está movilizarse con un grupo de pediatras para dar seguimiento médico a los niños desnutridos.

Mientras que la Pastoral ayudará a los hogares con una segunda dotación para un mes de comida, además de incluirlos en un proyecto de desarrollo integral para incentivar el tema de producción agrícola, cuidado de aves de corral, atención de salud y nutrición.

 

 

 

ESCRITO POR:

Ana Lucía Ola

Periodista de Prensa Libre especializada en temas comunitarios, con énfasis en Salud y Educación, con 17 años de experiencia. Reconocida con el Premio de Prensa Libre en categoría Reportaje, en 2019. Premio de la UPANA por Informar a la población guatemalteca sobre la realidad en nutrición y desnutrición en el país, en 2019. Diplomado El periodismo en la era digital como agente y líder de la transformación digital impartido por el Tecnológico de Monterrey.