De acuerdo con Ramazzini, todo obispo y sacerdote debe presentar su renuncia al Pontífice al cumplir 75 años y dependerá de la decisión del Papa si se sigue o no prestando servicio en la Iglesia Católica.
“Cuando cumplí 75 años tuve que enviar mi carta de renuncia al papa Francisco, que es la ley de la Iglesia, que es para los obispos y sacerdotes, el único que no hace eso es el Papa, no tiene obligación de presentar su renuncia a nadie”, dijo Ramazzini.
Agregó que “envié mi carta y el Papa me pide que siga otros años más aquí sirviendo en la Diócesis de Huehuetenango, esto es lo que el Papa me ha pedido y todavía en su carta me ha dicho ´yo ya tengo 85 años y sigo sirviendo a la iglesia, tú apenas tienes 75 años, te llevo 10 años todavía estoy de servicio´ me escribió en la carta”, señaló el religioso.
Ramazzini dijo durante la transmisión que aún no le ha respondido al Papa, pero adelantó que seguirá en el cargo. “He aceptado con gusto, con alegría la decisión del Santo Padre, del papa Francisco”, refirió.
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De acuerdo con la información, Ramazzini envió su carta de renuncia el 16 de julio pasado, pero debido a los procesos establecidos por el Vaticano, la respuesta recién le fue anunciada, por lo que el religioso la dio a conocer el pasado 15 de agosto.
El 5 de octubre de 2019, junto a otros 12 obispos del mundo, Ramazzini se convirtió en otro príncipe de la Iglesia, como se les conoce a los cardenales, quienes desde su dignidad se colocan en la línea de posibles sucesores del Papa.
Luego del consistorio público en los que el papa Francisco nombró a los nuevos cardenales estos se convirtieron en miembros del Colegio Cardenalicio, que no es más que un consejo de alta jerarquía eclesiástica integrado por todos los proclamados cardenales.