El boletín hidrológico del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología precisaba que ayer el nivel del lago se encontraba a 2.64 metros, 1.14 metros por encima del de alerta.
Vinicio Montero, viceministro de Recursos Naturales del Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARN), explicó que si los estudios geológicos indican que es factible drenar agua por la gruta, “los trabajos serán manuales y no se utilizaría maquinaria pesada ni ninguna clase de explosivo”.
Según Montero, debido al movimiento de tierras ocurrido alrededor del lago por la construcción de inmuebles y situaciones antropogénicas, los sedimentos habrían bloqueado la entrada de agua al resumidero.
Trabajo mínimo
Geovani Martínez, delegado regional de Petén de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, explicó que la gruta Chamamantok se encuentra a unos 50 metros de la orilla del lago y que el trabajo de recuperación consistiría en despejar manualmente la tierra y sedimentos que bloquean la entrada del agua.
Martínez precisó que antes de efectuar cualquier trabajo es fundamental contar, además de los estudios geológicos, con los de impacto ambiental.
Montero coincidió en que se debe presentar un instrumento de protección ambiental, el cual es mínimo, porque los trabajos consisten en limpieza y movimiento de tierras.
“Se va a canalizar el agua a la grieta, se mitigará cualquier impacto, si es que existiera”, añadió.
Carlos Emilio Matus, director ejecutivo de la Autoridad para el Manejo y Desarrollo Sostenible de la Cuenca del Lago Petén Itzá, confirmó que no se efectúa ningún trabajo en la gruta y que esperan los estudios.
Preocupa crecida
Temen contaminación del agua y pérdidas en el turismo.
Autoridades señalan que el nivel del lago podría alcanzar fosas sépticas y drenajes.
Comercios cercanos a la orilla ya reportan pérdidas.
Infraestructura de varios municipios ha sido dañada.