Honely Pineda, epidemióloga del área de salud, ha informado que el primer caso se reportó en ese departamento el 12 de diciembre de 2023. Desde entonces ha habido un incremento a 36 casos hasta el 30 de enero, con la mayor incidencia en el municipio de Cuyotenango, donde las autoridades iniciaron las investigaciones para determinar las causas de la enfermedad.
En esa localidad hay 12 casos registrados, mientras que también se han reportado casos en Mazatenango, Samayac y San Bernardino.
Los pacientes están siendo atendidos en el Hospital Nacional de Mazatenango y el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (Igss).
EN ESTE MOMENTO
El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) ha desplegado un equipo de respuesta rápida para investigar las causas de este brote en los cuatro municipios afectados.
Pineda explicó que las autoridades están llevando a cabo visitas domiciliares a los pacientes afectados por el brote, para tomar muestras de agua, sangre y heces fecales con el objetivo de determinar las causas y prevenir un aumento en la incidencia a nivel departamental.
Hasta el 30 de enero, el Hospital de Mazatenango ha internado a 11 pacientes, de los cuales siete han sido dados de alta con una evolución satisfactoria, mientras que uno será trasladado al Hospital Regional de Quetzaltenango debido a su estado grave.
José Hastedt, director del nosocomio de esa localidad, ha informado sobre la alerta epidemiológica debido a esta enfermedad, describiéndola como una afección que puede provocar daños neurológicos, posiblemente relacionados con problemas gastrointestinales, virales o bacterianos.
Según Hastedt, se han realizado varios cultivos para descartar la presencia de Campylobacter jejuni, así como pruebas de sangre para descartar dengue y chikungunya, con resultados negativos hasta el momento.
Además, dijo que se han realizado exámenes de sangre y heces para descartar otras posibles causas del síndrome de Guillain-Barré, la cual es compatible con los casos del brote detectado en la región sur del país.
En un comunicado que la cartera de Salud emitió este martes 30 de enero, describió puntualmente las acciones para dar seguimiento a los casos detectados:
- Análisis de expedientes de pacientes egresados, para dar el seguimiento a nivel comunitario y conocer cómo fueron tratados durante su estadía en el hospital.
- Evaluación de pacientes actualmente ingresados.
- Realización de visitas domiciliarias a pacientes dados de alta para obtener información directa y visitas a los hogares de pacientes hospitalizados para consultar con familiares.
- Además, otro equipo está investigando informes sobre dos casos fallecidos en el Hospital Regional de Occidente con síntomas de enfermedad neurológica aguda, sospechosos de Síndrome de Guillain-Barré.
- Se está realizando una búsqueda retrospectiva a nivel institucional para recopilar información relevante.
Este tipo de pruebas tomadas tanto en pacientes hospitalizados, como en sus domicilios, permitirán focalizar los estudios en la posible contaminación del agua o alimentos mal cocidos.
Además, se han realizado exhaustivos exámenes de sangre y de muestras fecales para descartar otras posibles causas del síndrome de Guillain-Barré, el cual comparte similitudes con los casos del brote detectado en la región sur del país. Estas pruebas son fundamentales para identificar cualquier patógeno o toxina que pudiera estar relacionado con la enfermedad.
La realización de estos análisis tiene como objetivo principal enfocar los estudios en la posible contaminación del suministro de agua o en la manipulación inadecuada de alimentos, como factores desencadenantes del brote.
“Hemos estado haciendo varios cultivos para descartar Campylobacter jejuni, pruebas de sangre para descartar dengue y chikungunya que por el momento han dado negativos. Se han hecho examen de sangre y heces para poder descartar porque la causa del síndrome de Guillain Barré puede ser por varios factores que lo pueden desencadenar ya que puede ser por agua contaminada, comida mal cocida”, explicó Pineda.
Detectar la presencia de agentes patógenos en estas muestras, sería crucial para implementar medidas preventivas adecuadas y evitar la propagación continua de la enfermedad. No obstante, desde ya se hace un llamado a la población para tomar precauciones.
Según la epidemióloga, al tratarse de un trastorno neurológico similar al Guillain-Barré, los síntomas suelen comenzar en los pies y extenderse hacia arriba.
Sin embargo, en estos casos, la mayoría de los pacientes experimentan hormigueo en las manos, cansancio general y debilidad muscular en miembros inferiores y superiores, lo que dificulta la movilidad y la manipulación de objetos.
Además, reafirmó que esta enfermedad no se contagia por contacto, es decir que no se transmite de persona a persona, por lo que explicó que la población puede permanecer tranquila.