Se evaluó a 136 mil 144 jóvenes, siete de cada 10 estudiaron en un colegio privado, y dos de ellos en establecimientos públicos, una cantidad mínima en el sector municipal y por cooperativa. La proporción de mujeres y hombres que se sometieron a las pruebas fue similar, y siete de cada 10 tenía 18 años o menos.
Los resultados son de la primera evaluación que el Mineduc hace después de la pandemia del covid-19, pues durante el 2020 las pruebas fueron suspendidas al igual que las clases presenciales, se retomó en el 2021 pero se realizó un estudio exploratorio de participación voluntaria y se utilizó una plataforma en línea; solo el 16.91% de los 159 mil 106 graduandos de ese año se sometió a la prueba.
El rendimiento en Lectura y Matemáticas se ha mantenido bajo entre los egresados del Sistema Educativo Nacional, indistintamente de la carrera, desde que se implementa esta evaluación. La tendencia año con año era de una leve mejora en el desempeño de los estudiantes en ambas áreas, lo que no sucede en la prueba del 2022 -se implementó en línea y presencial-, que muestran una regresión en lectura.
Retroceso en Lectura
Siete de cada 10 estudiantes están en el nivel de “no logro”, y solo tres están en “logro”. Mientras que en el 2019 el resultado de logro fue 37.03%, para el 2022 este descendió a 30.82%, es una pérdida en el desempeño de 6.21%.
Carlos Aldana, catedrático universitario y especializado en Educación, menciona que los resultados evidencian un abandono de la lectura y de todas las capacidades lectoras y cognitivas que eso implica.
Con la pandemia se dio un desinterés y falta del hábito de la lectura entre los jóvenes, que estuvieron más en contacto con plataformas digitales, es una tendencia global como producto de la pandemia que está cobrando la factura.
“Hay un mundo que está leyendo menos, pero también hay un Gobierno, un ministerio de Educación que tampoco se preocupa en implementar estrategias concretas para propiciar la lectura y eso es realmente preocupante”, dice Aldana, pues se afecta la creatividad, el desarrollo cognitivo y de habilidades de análisis, instrucción y para el juicio crítico.
El Progreso y Zacapa fueron los departamentos con la mayor disminución de resultados, con una caída de 10.57% y 10.22%, respectivamente. Mientras que en Totonicapán (0.56%) y San Marcos (0.52%) el impacto fue menor.
Para Ester Ortega, exviceministra de Educación y especialista en el área educativa, los resultados de las pruebas de graduandos 2022 se dan a conocer muy tarde, pero no sorprende el bajo desempeño en Lectura que alcanzaron los estudiantes, debido a la intermitencia de las clases presenciales como daño colateral de la pandemia.
Problema de números
Los graduandos han tenido serios problemas con el área numérica, que han mostrado los resultados más bajos en las pruebas del Mineduc. En el 2019 solo el 13.6% alcanzó un logro, para el 2022 subió a 14%, es una mejora de 0.4% que es insuficiente, ya que el 86% de los jóvenes tuvo un bajo desempeño en Matemáticas.
Al observar los resultados por departamento, el mayor retroceso ocurrió en Quiché con 3.07 puntos porcentuales menos que en el 2019, y Huehuetenango con 3.5 puntos. El que tiene un avance significativo es Izabal cuyo desempeño subió 6.46%.
Plantear la pregunta qué se está haciendo en esos departamentos para tener un mejor o menor desempeño en el área numérica es importante en este punto a criterio de Aldana, y parte de la respuesta recae en el trabajo de los docentes que debe tener una formación especializada en Matemáticas para que esto se vea reflejado en el resultado de los estudiantes, con lo que coincide Ortega.
Privado vs público
Hay una marcada brecha entre el desempeño de los graduandos en el sector privado y en el público. Los estudiantes de los colegios mostraron un mejor rendimiento en las áreas evaluados.
En lo que respecta a Matemáticas la diferencia es de 8.82%, mientras que en Lectura es de 6.65%.
Aldana es de la opinión que la educación pública ha venido deteriorándose con los años, partiendo desde la cobertura en el nivel diversificado, ya que el 74% de los graduandos evaluados era del sector privado, que en pandemia tuvo mejor capacidad de conectividad y recursos digitales para continuar con el aprendizaje, lo que contribuyó en el rendimiento de sus estudiantes y estas pruebas lo evidencian.
“Estos resultados reflejan el abandono histórico (de establecimientos oficiales) durante la pandemia y es una llamada de atención para el Gobierno. Estos números son absoluta responsabilidad del Ministerio de Educación, porque es directamente responsable de cómo funciona el sector público”, agrega.
La medición según la rama de enseñanza indica que los estudiantes de Bachillerato y Perito tienen un mejor desempeño tanto en Lectura como en Matemática. Los resultados más bajos fueron en Magisterio para Preprimaria y en Secretariado.
Si bien el impacto negativo se da con graduandos de las distintas carreras, la preocupación mayor es el bajo desempeño de los egresados de magisterio, pues son los docentes que trabajarán en los cimientos del aprendizaje de la niñez y necesitan tener un nivel apropiado en Matemáticas y compresión lectora.
Aprendizaje en pandemia
Con la pandemia, el uso de recursos digitales se convirtió en una alternativa para continuar con el aprendizaje de los estudiantes a todo nivel. El informe señala que el 99% de los graduandos recurrieron al internet para hacer tareas, la mitad de ellos uso el servicio residencial para recibir clases virtuales. El 89% dijo tener computadora o dispositivo electrónico para estudiar.
Las plataformas virtuales fueron el medio más usado para recibir clases (75%), pero también se utilizaron guías de autoaprendizaje (14%) y cursos por televisión (3%).
El internet inestable fue una de las principales dificultades para recibir clase, como señala el 59% de los estudiantes.
- ¿Qué mejorar?
Los entrevistados indican que los resultados de las evaluaciones de graduandos deben servir al Mineduc para implementar planes para mejorar las condiciones de aprendizaje de los estudiantes, adoptar una estrategia de país para potencializar las habilidades de Lectura y Matemáticas en los estudiantes de país desde la primera infancia, con el involucramiento tanto del gobierno de turno, como de los distintos sectores, entre ellos la sociedad civil.
“El hecho de que haya números bastante nefastos entre graduandos, significa que necesitamos hacer un esfuerzo desde las bases, desde Preprimaria hasta el final del sistema educativo”, dice Ortega.
El resultado no será inmediato, pero se debe adoptar una visión de Estado que perdure en el tiempo y permita que los egresados del diversificado puedan incorporase con habilidades y conocimiento suficientes al mercado laboral o a la vida universitaria.
