Según la institución, unas 84 acciones de amparo, de casi mil que se han otorgado durante los últimos seis años, tienen un patrón similar, lo que sugiere la existencia de una estructura que haría uso de este recurso para beneficiar a una o varias farmacéuticas.
Byron Cabrera, jefe del departamento legal del IGSS, dijo que en las 84 acciones de amparo analizadas, se estableció la recurrencia de los mismos abogados y médicos. Algunos de los abogados aparecen en 50 de estos amparos, según la información.
Los medicamentos amparados son para el tratamiento de enfermedades catastróficas y crónicas degenerativas, como cáncer, por lo que los medicamentos tienen un costo de entre Q40 mil y Q50 mil, según Cabrera.
La vocera del Seguro Social, Lucía Dubón, dijo que el IGSS ha erogado más de Q600 millones por la compra de estos medicamentos y aseguró que mientras ocurre la investigación se seguirá cumpliendo con las orden emitida en los amparos.
Alma Robles, de la Asociación Héroes de Esperanza, asegura que los pacientes acuden a este recurso cuando han agotado todas las instancias para que el Seguro Social les de los medicamentos que requieren.
“El paciente, en su desesperación, acude a los amparos para obtener el medicamento que puede mejorar su calidad de vida”, dice la paciente.